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El legislador porteño Alejandro Bodart (Nueva Izquierda) presentó hoy un recurso de amparo para evitar la apertura al público de la estación Juan Manuel de Rosas del subte B. A partir de informes realizados por los trabajadores del subterráneo, Bodart considera que las estaciones son muy peligrosas tanto para los pasajeros como para los trabajadores.

El escrito, de 22 carillas y con 57 fotografías, está en el Juzgado Contencioso Administrativo y Tributario Nº 20, a cargo de la jueza Cecilia Mólica Lourido.

Bodart solicita una acción de amparo en los términos del artículo 43 de la Constitución Nacional y pide una medida cautelar  que detenga la inminente inauguración de la estación Juan Manuel de Rosas “hasta tanto el demandado no demuestre fehacientemente que la situación de vulnerabilidad de los actores y damnificados ha cesado”.

“Las condiciones de seguridad e higiene del edificio en cuestión transgreden la normativa vigente. Con el afán de aprovechar estos tiempos de campaña electoral, el Gobierno de la Ciudad -a través de la empresa pública SBASE (Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado) pretende inaugurar una obra inconclusa con graves falencias estructurales que conllevan peligros concretos para la integridad física e incluso la vida de los usuarios y trabajadores del subte”, sostiene el escrito presentado a la justicia porteña.

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció que el viernes 26 de julio inaugurará las estaciones Echeverría y Juan Manuel de Rosas de la línea B del subte. Las estaciones en el barrio de Villa Urquiza fueron anunciadas en varias oportunidades pero la apertura se fue postergando.

“Mauricio Macri apura inauguraciones de campaña, sin prever los riesgos. Considero que antes de inaugurar hay que garantizar la seguridad de los usuarios y trabajadores. En la estación Rosas y el taller-cochera no sólo existe riesgo eléctrico, sino graves incumplimientos a la Ley 19.587 de Seguridad e Higiene y al decreto reglamentario 351/79. Nuestro amparo se basa en los relevamientos técnicos realizados por especialistas y delegados del subte."

Ante el anuncio del poder ejecutivo de la ciudad, la Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro presentó un informe sobre las condiciones de higiene y salubridad de las estaciones, los túneles y los lugares de trabajo.

El informe muestra que el riesgo eléctrico es alto debido a las filtraciones de agua que se dan en muchos puntos de la construcción. En las fotos y el video que acompañan las evaluaciones técnicas se ven sectores de las estaciones, vestíbulos y túneles inundados o muy afectados por la humedad. Las imágenes muestran, por ejemplo, tableros eléctricos y tomacorrientes lindantes con paredes húmedas. El agua que se filtra es salada y por lo tanto afecta en mayor grado las instalaciones. Esta situación en la que coinciden el riesgo de inundación y de electrocución afecta tanto a los pasajeros como a los trabajadores del subterráneo.

Las cochera taller de la línea B también están construidas a los largo de la Avenida Triunvirato. En este sector, de unos 700 metros “Al igual que en la estación Juan Manuel de Rosas, el riesgo eléctrico se erige como uno de los riesgos más difundidos en la cochera taller habida cuenta de las innumerables filtraciones que se dan a lo largo de todo el túnel y el taller”, dice el informe. Las imágenes muestran “las numerosas fisuras en la bóveda del túnel de hormigón proyectado y las manchas dejadas por las escorrentías de agua con sales las cuales ya están deteriorando con su potencial corrosivo las vías, el tercer riel, el cableado, las cajas eléctricas y de señales y las instalaciones contra incendio”.