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Después de ocho horas de debate, el plenario de comisiones de Diputados dio dictamen a tres de los proyectos de la reforma judicial que serán tratados hoy en el recinto. La iniciativa que modifica el Consejo de la Magistratura sufrió importantes cambios: el manejo del presupuesto judicial queda en manos de la Corte y los jueces y fiscales podrán designar a sus secretarios, en tanto que el resto del personal deberá concursar. Estas “consideraciones” habían sido planteadas por los ministros de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti y Elena Highton de Nolasco en una carta que le enviaron a la presidenta.

“Quedamos muy pocos diputados y es voluntad de los presidentes de las comisiones dar por concluido el debate”, dijo la diputada Diana Conti. Eran las 19:15 y no había más de 15 diputados en la sala del Anexo de la Cámara. Desde el mediodía habían expuesto sus argumentos, además de una decena de diputados, la Asociación de Magistrados, la Federación Argentina de Colegios de Abogados, el Colegio Público de Abogados porteños, CIPPEC, ACIJ, ADC, entre otras organizaciones judiciales.

Previo al debate, el jefe de la bancada oficialista, Agustín Rossi, había adelantado que, a partir de la nota enviada por Lorenzetti, podrían incorporarse modificaciones a unos de los proyectos que llegaron del Senado. El plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia comenzó a sesionar cerca del mediodía. Los temas a tratar eran la reforma del Concejo de la Magistratura, la creación de tres Cámaras de Casación y la limitación a las medidas cautelares.

Entre los oradores estuvieron el ministro de Justicia, Julio Alak, y el secretario de Justicia, Julián Álvarez. "La gran mayoría de la población quiere una reforma, quiere mayor participación y mayor independencia en el Poder Judicial", dijo Alak. Esa independencia, dijo, debe ser de "los intereses de algunas corporaciones económicas". Álvarez sostuvo que la democratización de la justicia se inició cuando Néstor Kirchner, al asumir, dijo que "no iba a dejar las convicciones en la puerta de la Casa de Gobierno". Sobre las cuestiones planteadas por los ministros de la Corte, el secretario de Justicia evaluó como "aceptables algunas de las propuestas”.

Entre las 18.30 y las 19 horas estaba previsto el cierre del debate. A esa hora tomó la palabra Elisa Carrió. "Hoy cuando vi la carta de los jueces me quedó claro: acá hubo un pacto entre el presidente de la Corte Suprema y la Presidenta de la República Argentina", denunció. Cuando la diputada terminó su discurso se levantó de su silla y se fue esquivando a los periodistas. Con ella se fueron un gran número de legisladores, opositores y oficialistas.

Después de Carrió habló el presidente de la Comisión de Justicia, Jorge Yoma. El riojano anticipó su rechazo a los proyectos. “A pesar de que creo que las modificaciones no responden a ningún pacto”, dijo. Cada vez había menos diputados escuchando. Hubo tiempo para que hicieran uso de la palabra el radical Oscar Aguad y Omar Duclós, del GEN. Todavía quedaban cuatro diputados en la lista de oradores y unos quince sentados en sus asientos. “De 150 diputados que conformamos las comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia quedamos muy pocos”, dijo Diana Conti y levantó la sesión.

Los tres proyectos obtuvieron despacho favorable. El que establece reformas en el Concejo de la Magistratura fue el único que salió con cambios respecto a los que obtuvieron media sanción en el Senado la semana pasada. A partir de estas modificaciones la Corte Suprema mantendrá el manejo del presupuesto judicial (el original traspasaba el control de los fondos al Concejo de la Magistratura) y los jueces y los fiscales podrán designar al personal letrado de sus dependencias. Los legisladores opositores firmaron en conjunto tres dictámenes de rechazo a los proyectos oficiales.

Los proyectos serán debatidos hoy en el recinto de la Cámara de Diputados. El jefe de la bancada oficialista, Agustín Rossi, se mostró confiado en lograr los votos necesarios para su aprobación.