Es mayor de edad, oriundo de Aguas Dulces y fue trasladado a la Unidad de Hechos Complejos de la Jefatura de Montevideo y se le tomaron muestras de ADN para cotejar con las del cuerpo de Lola y los rastros de la mochila.
Detuvieron a un nuevo sospechoso por el crimen de Lola Chomnalez, la adolescente de 15 años que apareció muerta en los médanos de Valizas el 28 de diciembre del año pasado. Es mayor de edad, oriundo de Aguas Dulces y fue trasladado a la Unidad de Hechos Complejos de la Jefatura de Montevideo y se le tomaron muestras de ADN para cotejar con las del cuerpo de Lola y los rastros de la mochila.
La causa está a cargo de la jueza penal Silvia Urioste y ya hubo más de quince detenidos -y liberados- por el crimen: el estudio comparativo con el perfil genético del ADN de Lola y de los rastros de la mochila dieron negativo. El último fue un cuidacoches de 27 años conocido como “El Chalila”, que fue excarcelado en abril. dio negativo el estudio comparativo de ADN con el perfil genético de la mancha de sangre que había en la mochila de la adolescente. El hombre declaró seis horas ante la jueza y se contradijo. Primero negó conocer a Lola, después lo admitió pero negó haberla asesinado.
Lola veraneaba con la familia de su madrina en Barra de Valizas, Uruguay, donde había llegado el 27 de diciembre para pasar fin de año. El domingo a la tarde pidió permiso para ir a la playa y no volvió más. Apareció muerta dos días después, asfixiada y enterrada entre las dunas.
En ese momento empezó la búsqueda y los rastrillajes, que duraron dos días. El cuerpo apareció la noche del 30 de diciembre, fue repatriado y enterrado en el cementerio de Recoleta. Diecisiete días después, apareció la mochila de Lola, con rastros de sangre.
La causa primero estuvo a cargo de la jueza Marcela López Moroy, que subrogaba a Urioste. En enero dejó la causa por stress y un cuadro de lumbalgia. Durante ese fin de semana quedó a cargo de la jueza de Paz de Rocha, María José Camacho y el 13 de enero empezó a actuar Urioste, titular del Juzgado de Letrados de Segundo Turno de Rocha, Uruguay. En marzo Gabriela Sierra -la fiscal a cargo de la investigación- fue trasladada a Minas (Lavalleja) y la reemplazó Rodrigo Morosoli.
En abril realizaron una nueva inspección ocular en los médanos de Barra de Valizas. En mayo realizaron peritajes psicológicos a la madrina (Claudia Fernández), su esposo (Hernán Tuzinkevich) y el hijo de 14 años del hombre.