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El sospechoso  más buscado durante las últimas horas para intentar esclarecer el crimen de Lola Luna Chomnalez, fue detenido esta tarde por la policía, cerca de las 17 (hora uruguaya), mientras caminaba por las calles del balneario Barra de Valizas, donde fue enterrada la adolescente.

El vocero de la Suprema Corte de Justicia de Uruguay, Raúl Oxandabarat confirmó que el detenido( el décimo que tiene la causa desde que comenzó la investigación) es el hombre, apodado "Conejo" cuyo rostro difundió días atrás el Gobierno uruguayo. Tiene entre 40 y 50 años. A él, ayer también se refirieron los cuatro indagados por la jueza penal María López, que fueron liberados horas después.

Se trata del albañil,  que el pasado sábado 27 de diciembre,  había estado pintando el techo de uno de los ranchos ubicados sobre la costa, entre Valizas y Aguas Dulces. Uno de sus compañeros, Juan Sosa, uno de los liberados ayer por la jueza  dijo que desde ese día no lo vieron más.

“Es un conocido de la zona, principalmente en la ciudad de Castillos, que hace changas y es pescador", dijeron a Infojus Noticias fuentes de la investigación. Y agregaron que el hombre es canoso, de estatura media y que vivió en Montevideo.

El detenido está alojado en la seccional 4° de Castillos  y será trasladado a Rocha para declarar ante la jueza Marcela López Moroy. Se trata de una detención clave en la investigación por el crimen de la adolescente argentina, ya que la tarde del domingo 28 de diciembre el hombre habría estado en el balneario, Barra de Valizas, como confirmaron los testimonios.  Ahora, ante la jueza deberá explicar todos sus movimientos durante ese día.

La causa por el crimen de Lola Chomnalez ayer había quedado sin detenidos, después de que la magistrada liberó a cuatro sospechosos. Por la noche,  la jueza  ordenó la captura de dos hombres conocidos por sus alias: “Conejo” y “El Huguito”. El primero es el hombre cuyos rasgos coinciden con el identikit difundido el lunes y el otro, es uno de sus compañeros de trabajo en una obra de construcción en un rancho de Valizas. Para ordenar las detenciones de ambos fueron claves los testimonios de parte de los cuatro hombres que fueron liberados ayer.

“Conejo”, el primero de los sospechosos en ser identificado era intensamente buscado por la policía en la zona de Rocha. Su madre se presentó ayer por la tarde frente a López Moroy, donde aseguró que no sabía dónde estaba su hijo, pero le remarcó: “Mi hijo no es capaz de matar un pollo, menos creo que sea capaz de sacarle la vida a una mujer, pero vamos a esperar qué dice el dictamen judicial”.

La madrina de Lola declaró que la adolescente había salido caminando hacia la playa, en dirección a Aguas Dulces, con una mochila marca “Jansport” fucsia en la que tenía $ 2500. Y gente que estaba en la playa en las horas que desapareció la menor coincidieron a la hora de hablar de un “hombre canoso” que vieron cerca de la joven y ayudaron a elaborar el identikit del sospechoso.

Lola Chomnalez apareció asesinada la noche del marte, en una duna de la playa de Valizas. La buscaban desde el domingo 28 cuando su madrina, Claudia Fernández, y el marido de ella, Hernán Tuzinkevich, denunciaron su desaparición ante la policía local. La joven había llegado un día antes al balneario uruguayo desde Buenos Aires, donde vivía con sus padres.

Desde que se conoció el hallazgo del cuerpo de la joven –que no fue abusada sexualmente- en la causa hubo casi una decena de detenidos, que recuperaron su libertad en menos de 48 horas.

Fotos como pruebas

La jueza López ordenó la realización de un peritaje sobre la cámara de fotos presentada esta mañana por la madrina de la adolescente Claudia Fernández  y su marido Hernán Tuzinkevich , donde, según dijeron, constan fotos de la chica junto a ellos la mañana, momentos antes de desaparecer.

Fernández y Tuzinkevich estuvieron detenidos en el marco de la causa como sospechosos del homicidio luego de que la jueza López considerara que había muchas contradicciones e inconsistencias en sus relatos.

Los investigadores hicieron hincapié en las contradicciones sobre los horarios en los que había sido vista por última vez la adolescente argentina y las actividades que habían realizado en los momentos previos a la desaparición.

Gastón Chávez, uno de los abogados de la madrina de Lola, dijo días atrás que las fotografías corroborarán que la adolescente murió el domingo 28 de diciembre por la tarde y que la mochila color de ella que no fue hallada en la escena del crimen realmente existió.

"Hay una foto tomada en torno a las 10.13, 10.14 de la mañana, en realidad hay dos fotos: una que fue tomada con un celular el día que Lola llegó, que es un paisaje de la tarde de ella bajando del ómnibus con la mochila, y otras donde aparece ella, que son del balcón de la casa del padrino que da al mar y que por la ubicación del sol se nota que es de mañana", explicó Chávez a la prensa.

Según el letrado, "además de estas fotos, los informes forenses coinciden plenamente con las declaraciones del matrimonio sobre lo que Lola habría ingerido, tanto la noche anterior como el mediodía posterior, sobre la una de la tarde".

"La prueba determina que Lola razonablemente debe haber muerto en la tarde del domingo, lo que hace totalmente verosímil el relato de sus padrinos: que comió y salió a caminar, como había hecho la tarde anterior", opinó Chávez.

Por su parte, el otro abogado del  matrimonio, Gustavo Bordes, aclaró que aún no están listas las pericias telefónicas. Y señaló que “como abogado defensor nada tengo que decir; los policías y los investigadores están haciendo lo máximo y dando todas las garantías".​