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El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos junto al Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (RENATEA) del Ministerio de Trabajo hoy la segunda de las jornadas del congreso nacional sobre “Acceso a la justicia y el rol del Estado en el ámbito rural”. El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, dijo en el cierre que “el acceso a la Justicia hoy no es solo el derecho a los tribunales, sino que significa la posibilidad de tener todos los derechos”. También estuvo el secretario de Justicia, Julián Álvarez, y números jueces representantes de todas las provincias, además de autoridades del RENATEA.

Los casos de trata, reducción a la servidumbre y explotación infantil muchas veces son disfrazados por los perpetradores con el argumento de las “tradiciones del camperas de trabajo”. Para Alak, “la relación laboral en los campos ya no puede ser tener unas ovejitas, un lugar para dormir y un patrón que paga los vicios como si fuera un premio. Esas no son condiciones laborales sino explotación, y en la relación conjunta que se da entre la Justicia y el RENATEA”.

La defensora general de la Nación Stella Maris Martínez dijo que “durante mucho tiempo se habló de trata y eso parecía estar limitado a casos de delitos sexuales. Costaba y cuesta entender que el 50 por ciento de los casos de trata tiene como víctimas a trabajadores rurales”.

En los dos días que duró el evento hubo paneles como “El trabajador agrario como sujeto de derechos”, “El trabajo agrario como escenario del delito de trata de personas con fines de explotación laboral y trabajo infantil”, “La trascendencia social del acceso a la justicia” y “Presencia del Estado en el ámbito rural. Las nuevas herramientas de fortalecimiento”.

Florencia Carignano, subsecretaria de Acceso a la Justicia, habló en una de las mesas expositoras de cómo incluir a diferentes sectores de la población al derecho de la Justicia a partir de la llegada del poder judicial a todos los sectores. “En el 2003 no podías ir a hablarle de Justicia a la gente que no tenía para comer. Entonces primaban comedores infantiles. Antes se trataba de que todos coman. Cuando se vio salvada esa lucha que empezó Néstor Kirchner, se pudo pensar en otras cosas”, dijo Carignano.

Los trabajadores agrarios son uno de los colectivos que más sufren la vulneración de sus derechos ya que en muchos casos las condiciones de trabajo que deben soportar son demasiado precarias. En los últimos años, el gobierno nacional modificó el marco normativo del sector por medio de la sanción de la ley 26.727 que regula la actividad, y a través de la nueva institucionalidad estatal se está revirtiendo la situación.

Sin embargo para que los trabajadores agrarios puedan acceder plenamente a la Justicia es indispensable que desde los distintos organismos del Estado Nacional se trabaje de manera articulada. El Congreso tiene ése objetivo.

“Recuperamos desde el Estado un instrumento que nunca deberíamos haber perdido, como es el de mejorar desde el gobierno la calidad de vida de los trabajadores rurales, que quizá sea de los más postergados que existen”, contó Guillermo Martini, director general de RENATEA, y cerró diciendo que “parece naturalizado decir que los trabajadores del campo siempre trabajaron así, pero “con el accionar diario se busca reestablecer la condición de sujetos de derecho que tienen los hombres y mujeres que trabajan en el campo”.