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Una investigación realizada por el Programa Las Víctimas contra las Violencias del Ministerio de Justicia, que fue presentada en forma conjunta con Unicef, indica que al menos 13.359 chicos sufrieron distintos tipos de violencia -sexual, física, emocional y económica.

“Es fundamental que haya un compromiso ciudadano para denunciar las violencias”, señaló Johanna Goldwaser Yankelevich, integrante del programa, durante la presentación del informe que revela las problemáticas que enfrentan los equipos de ese programa, quienes tras recibir un llamado de alerta a la línea 137 acuden hasta el lugar donde se producen las violencias.

El programa Las Víctimas Contra Las Violencias, creado en el año 2006 durante la presidencia de Nestor Kirchner, y coordinado por Eva Giberti, brinda acompañamiento, atención y orientación a las víctimas de abusos y malos tratos causados por el ejercicio de violencias en ámbitos familiares. Kevin Wierzbinsky, colega de Goldwaser Yankelevich en el programa, tuvo a su cargo la lectura de la nota enviada por Giberti, que lamentó no poder estar en la presentación del informe que se hizo en las oficinas de UNICEF. En el escrito, Giberti destacó que a partir del llamado las y los profesionales se dirigen  donde se producen las violencias en el momento,  en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esto destacó la coordinadora les ha permitido elaborar un registro “único en su tipo”, que la representante de UNICEF Manuela Thourte destacó. E instala la propuesta como una “política pública de vanguardia”.

Desde los inicios del programa hasta julio de 2015, los equipos móviles atendieron a 23.404 víctimas de violencias producto de 17.707 intervenciones. Y 13.359 de estas víctimas eran niños, niños y adolescentes. Sobre estos mismas variables, hasta 2013, el programa registró que cada agresor en promedio generó dos víctimas.

En un primer nivel de análisis, Goldwaser Yankelevich señaló que “a priori se advierte equidad entre niños y niñas en tanto víctimas”, pero de un análisis desagregado de los datos surge que “las niñas sufren mayores niveles de violencia, como cristalización del sistema patriarcal. Según datos recogidos hasta 2013, estos alertas se reflejaban en que la victimización hacia las niñas se extiende por más tiempo (desde los 0 a los 18), mientras que los niños sufren mayores niveles de violencia entre los 0 y los 5 años de edad.

En ese informe, se recogieron datos de los primeros seis años de trabajo del equipo. Y se resaltó que mientras la violencia emocional no presenta mayores contrastes al diferenciar a las víctimas por género; frente a la violencia física y económica, se observan leves diferencias, siendo las niñas y las adolescentes las más agredidas. En tanto, la violencia sexual afecta cuatro veces más a las niñas y las adolescentes que a sus pares de género masculino.

Al finalizar la presentación, la representante del programa remarcó la importancia de “visibilizar los mecanismos de poder al interior de las familias” y de “correr el velo del no te metás”. Destacó que cualquier persona puede llamar al 137 para ayudar a las víctimas, y que serán atendidos por profesionales las 24 horas del día, los 365 días del año.

MB/Télam/LC