Embajada de Israel: a 22 años del atentado, sigue la investigación
La Secretaría Especializada de la Corte Suprema de Justicia, que tiene la causa, informó a Infojus Noticias que continúan en plena investigación y que la causa supera los 250 cuerpos. La causa volvió a tomar impulso recién en 2006, cuando el máximo tribunal firmó una resolución que evitó el cierre por prescripción. Nunca hubo detenidos.
Télam.
Después de 22 años, el atentado a la embajada de Israel en la Argentina todavía es materia de investigación judicial. Desde la Secretaría Especializada de la Corte Suprema de Justicia le afirmaron a Infojus Noticias que continúan en plena investigación y que la causa supera los 250 cuerpos. El 17 de marzo de 1992 a las 14.47 una explosión borró del mapa la sede diplomática, en la esquina de Arroyo y Suipacha, en Retiro. Murieron 29 personas. Cinco de ellas jamás fueron identificadas.
El expediente 143/1992 ingresó como competencia originaria al máximo tribunal el 24 de marzo de 1992. Desde ese momento está caratulado “sumario instruido en la comisaría 15 por averiguación de los delitos de explosión, homicidio y lesiones calificadas y daños con motivo del atentado a la embajada de Israel”.
Desde el primer momento, la investigación quedó en manos de la Corte Suprema de Justicia porque se trató de un caso diplomático extranjero.
En 1992, el máximo tribunal estaba encabezado por el juez Ricardo Levene (hijo), hoy fallecido. El magistrado abonó la teoría de implosión, pero el trabajo de los peritos descartó la posibilidad de que la bomba haya sido accionada dentro de la embajada. Al poco tiempo se confirmó que una camioneta Ford F-100 cargada con explosivos fue la que originó la detonación.
El gobierno israelí apuntó a un conflicto con Irán como razón del ataque. Semanas después del atentado, la organización Hezbollah se adjudicó la autoría del atentado.
En 1997, la Corte Suprema creó la Secretaría Especializada para investigar el atentado a la embajada. Después de cinco años de investigación, la Corte nunca determinó nada respecto de la materialidad del hecho, el modo en que se produjo, ni sobre su autoría. Nunca formuló una hipótesis seria sobre lo ocurrido aquel 17 de marzo de 1992.
En 1999, el coordinador de la Secretaría Especializada, Esteban Jorge Canevari de la Secretaría Judicial Nº 3, dictaminó que el autor intelectual del atentado había sido el líder de Hezbollah Imad Mugniyah. Desde el gobierno israelí informaron que en 2008 Mugniyah murió despedazado en una explosión.
La causa volvió a tomar impulso en 2006. En el último fallo de trascendencia y al que accedió Infojus Noticias, la Corte firmó una resolución que evitó el cierre de la causa por prescripción, pero también aclaró que el atentado no fue un caso de lesa humanidad.
Hasta ese año, nadie había impulsado la causa. El Estado de Israel nunca pidió ser querellante y la Corte menemista no le permitió a Carlos Susevich, familiar de una víctima, serlo. “Desde 2006, soy el único querellante en representación de todos los familiares”, dijo a Infojus Noticias Susevich.
La causa fue instruida por cuatro jueces y distintas formaciones de la Corte Suprema. Nunca hubo personas detenidas. Al día de hoy continúan los exhortos con Estados Unidos, Israel y países de Medio Oriente.
Hasta julio de 1994, el atentado a la embajada fue calificado como el peor ataque terrorista en la historia argentina. Lo superó el coche bomba que estalló en la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) y mató a 85 personas.
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