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La Policía Metropolitana detuvo a una mujer trans de 49 años que era “intensamente buscada” por la acusación de abusar sexualmente de menores en una peluquería de la provincia de Salta. El título del comunicado policial resalta un dato que parece llamar más al morbo que a la información: “Fue detenido un travesti pedófilo”. ¿Importa resaltar la identidad de una persona que cometió un crimen? La mayoría de los medios de tirada nacional replicaron el cable de la Metropolitana, casi sin retoques.

“Cayó peligroso peluquero travesti pedófilo”, publicó Crónica. “Detienen a un travesti acusado de abuso de menores”, tituló Diario Popular.“Más allá del delito que se investiga y de la culpabilidad que debe determinar la justicia, el resaltar la identidad travesti -un colectivo que está particularmente criminalizado- no ayuda en nada a lo que venimos construyendo en contra de la discriminación. El enfoque de la noticia es  discriminatorio y desconoce la ley de identidad de género. No contribuye en nada a que los medios no reproduzcan la discriminación”, dijo a Infojus Noticias Esteban Paulón, presidente de la Federación Argentina de Lesbianas, Bisexuales y Transexuales.

La orden de arresto la dio el Juzgado de Garantías de Séptima Nominación a cargo de Beatriz Renzi, que por estos días está de feria judicial.

El Departamento de División Seguridad Personal de la Policía de la provincia de Salta inició las tareas para capturar a Tamara Romina que, “trabajando como peluquera en esa provincia engañaba e inducía a menores de edad para que posaran desnudos, les sacaba fotos y luego abusaba sexualmente de ellos”, dice el comunicado de la Metropolitana.

“Una de las manifestaciones lingüísticas típicas radica en el uso del género masculino para referirse a travestis y mujeres trans cuya identidad de género es manifiestamente femenina, ignorando así lo dispuesto por la propia ley”, dice el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo. Desconocer el nombre de alguien es violencia psicológica y está penado por la ley 26743 de Identidad de Género.

Tamara Romina se fugó antes que las autoridades pudieran detenerla, pero tras una serie de escuchas telefónicas la policía salteña pudo establecer que se encontraba en la ciudad de Buenos Aires. A través de un requerimiento de cooperación intervinieron en la investigación la Superintendencia de Delitos Complejos y Crimen Organizado de la policía de la provincia de Buenos Aires, y el área de Investigaciones de la Comisaría de la Comuna 12 de la Policía Metropolitana

Finalmente y tras una serie de tareas investigativas conjuntas se la detuvo en la calle Julián Álvarez al 2.000, en el barrio porteño de Palermo.

“Más allá de los delitos que se cometan, en nuestro país se deben respetar los derechos humanos. El derecho a la identidad, es uno de los derechos fundamentales. Por eso, y porque la comunidad travesti es una de las más estigmatizadas todavía, hay que repudiar estas publicaciones”, dijo Paulón.