Lo señaló la prestigiosa revista estadounidense Foreign Affairs, editada por el Consejo de Relaciones Exteriores. "No hay muchas instituciones lo suficientemente poderosas para poner de rodillas a una nación soberana”, escribió el autor de la nota, Félix Salmon.
La prestigiosa revista estadounidense Foreign Affairs sostuvo que la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos tomó una posición "fundamentalista peligrosa", cuando se negó a aceptar la apelación presentada por Argentina en el caso contra los fondos buitre.
"No hay muchas instituciones lo suficientemente poderosas para poner de rodillas a una nación soberana. La mayoría de las que ejercen su poder lo hacen con cuidado, el resto son fundamentalistas peligrosas", señaló el artículo publicado por El Council on Foreign Relations (Consejo de Relaciones Exteriores).
"La última semana, la Corte Suprema de Estados Unidos -y el resto del sistema judicial federal de Estados Unidos- se puso de lleno en la última posición cuando se negó a aceptar una apelación presentada por Argentina contra una decisión de un tribunal inferior", agregó.
El autor del documento, Félix Salmon, aseguró además que "las consecuencias están determinadas a ser terribles para Argentina". "En términos más generales, la sentencia hará que sea más difícil que los países se liberen de la carga del sobre endeudamiento. Será muy malo para los mercados de capital internacionales. Ah, y también disminuirá la soberanía nacional", advirtió. Salmon, un reconocido periodista financiero.
Salmon mencionó que con la confirmación del fallo de los tribunales inferiores, "los inocentes están siendo castigados" siendo que los tenedores de bonos que entraron en los canjes de 2005 y 2010, "no han hecho nada malo y no hay manera de que vayan a obtener su pago en su totalidad y a tiempo, como a Argentina le gustaría
La nota señala que "Argentina no miente cuando dice que simplemente no puede pagar lo que los tribunales de Estados Unidos demandan, que es pagarle los holdouts en su totalidad". También recuerda el proceso de reestructuración de deuda de 2005 y 2010 y que el 93 % de los bonistas acordó ingresar en este canje de títulos. "Estos canjes de títulos se transformaron en el medio establecido por el cual los países reestructuran sus deudas, para evitar seguir en default de manera indefinida", explica.
"Un país deudor necesita poder pagarle a los tenedores de bonos reestructurados sin pagarle a los holdouts. Caso contrario, nadie podrá participar en el futuro en un canje de deuda, y ningún país podrá jamás reestructurar su deuda", indicó Salmon. Y agregó que por eso Brasil, Francia, México y Estados Unidos apoyaron a Argentina en el caso Elliot, porque consideraron que era necesario "mantener el derecho soberano de pagarle a un grupo de acreedores (los que entraron en el canje de deuda) sin pagarle al otro (los buitres)".