El Tribunal Oral en lo Criminal Nº 2 de Morón condenó hoy a reclusión perpetua a Claudio Pagliuca por haber matado a mazazos a su ex mujer, Alejandra Córdoba, en octubre de 2012 en Morón. Lo descubrieron grabaciones de las cámaras de seguridad del municipio.
El Tribunal Oral en lo Criminal Nº 2 de Morón condenó hoy a reclusión perpetua a Claudio Pagliuca por haber matado a mazazos a su ex mujer, Alejandra Córdoba, en octubre de 2012 en Morón. El hecho fue descubierto por las grabaciones de las cámaras de seguridad del municipio.
El 4 de octubre de 2012, la víctima estaba abriendo la puerta de su casa, cuando apareció un auto y bajó un hombre, que corrió unos metros hacia ella y le pegó con una maza en la cabeza. Las cámaras mostraron al hombre volverse rápido al auto y huir del lugar.
"Escuché los gritos de dolor, alaridos. Salí corriendo para ver qué pasaba y la ví a mi hija tirada. Ví el momento en el que este hombre le pegaba dos veces más y escapó corriendo", declaró el padre en el juicio.
Las imágenes de la cámara de seguridad fueron un elemento de prueba clave para que los jueces Osvaldo Cedarri, Aníbal Termite y Humberto González fallaran contra Pagliuca. El homicida huyó a la ciudad santacruceña de Río Turbio. Doce días después del crimen fue localizado y detenido.
Víctima y victimario fueron pareja durante siete años, pero al momento del femicidio hacía cuatro que estaban separados. La mujer lo había denunciado reiteradas veces. La última, un día antes de ser asesinada. Testigos declararon que Pagliuca "era muy celoso" y le recriminaba que estuviera saliendo con otro hombre, pese a que ya hacía cuatro años que se habían separado.
“Estamos atisfechos con este dictamen que es el que esperábamos en función de lo aberrante del caso y que además reconoce al femicidio como un agravante. Es necesario que toda la sociedad, y especialmente la Justicia, tome conciencia de la gravedad de hechos como éste para que no se repitan", dijo el intendente de Morón, Lucas Ghi, al salir de la audiencia a los medios presentes.
La figura de femicidio fue incorporada en noviembre de 2012 como agravante en la pena de homicidio de una mujer y la sentencia indicada para estos casos es reclusión perpetua, mayor que la condena por homicidio fijada entre 8 y 25 años.