La Sala III del máximo tribunal penal del país revisará lo resuelto por el Tribunal Oral Federal 4, que absolvió a Cavallo al término de un juicio oral que terminó el 6 de octubre último. El TOF entendió que no se probó la comisión de delitos en la operatoria efectuada durante el gobierno de Fernando de la Rúa.
La Cámara Federal de Casación deberá resolver si confirma o revoca la absolución del ex ministro de Economía Domingo Cavallo en la causa donde fue juzgado por la operatoria de megacanje de deuda en el 2001, al aceptar un recurso de queja de la fiscalía. La Sala III del máximo tribunal penal del país revisará lo resuelto por el Tribunal Oral Federal 4, que absolvió a Cavallo al término de un juicio oral en el que entendió que no se probó la comisión de delitos en la operatoria efectuada durante el gobierno de Fernando de la Rúa. Los camaristas de Casación Mariano Borinsky, Eduardo Riggi y Liliana Catucci aceptaron la queja de la fiscal de ese juicio, Fabiana León.
Cavallo fue absuelto el 6 de octubre pasado luego de que la fiscalía pidió una condena de tres años de prisión por "negociaciones incompatibles con la función pública". Tras abrir la queja, el Tribunal deberá dedicarse ahora a revisar lo resuelto en el juicio oral para decidir si lo confirma o revoca.
Durante el juicio, la fiscalía había pedido que se lo condene “por haberse interesado directamente en la operación de canje de bonos en miras a que los bancos autorizados obtuvieran un beneficio”. Ese beneficio no tenía que ver con las comisiones que los bancos obtendrían al gestionar la operación, sino por el mejoramiento en la calidad de sus activos: los mismos bancos eran tenedores de bonos que estaban por caer en default, y administraban otras grandes sumas a través de sus carteras de clientes.
Los bancos tenían 5580 millones de dólares invertidos en bonos, y administraban otros 14 mil millones de sus clientes. Como el país estaba al borde del default, David Mulford, en nombre del Credit Suisse, acercó la propuesta de la megaoperación. “Para ayudar a la Argentina”, quiso justificar Cavallo.
El banquero estuvo imputado en la causa, pero se negó a declarar hasta que fue sobreseído. Con el Megacanje, se extendieron plazos hasta el 2031 y se aumentó la deuda nominal del país en 50 mil millones de dólares. Para Cavallo, “en todos los canjes” los bancos eran tenedores de bonos. Bajo esa tesis, el beneficio que obtuvieron no sería ilegal.
"Robó, huyó y no lo pescaron", dijo después de conocerse la absolución Mario Cafiero, uno de los denunciantes. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner había calificado al Megacanje y el Blindaje como las mayores estafas de la historia financiera de la Argentina.
Télam/RA