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Infojus Noticias

16-11-2013|16:30|Juicios Lesa Nacionales
La audiencia más larga del juicio: se extendió por más de 14 horas

Megacausa Jefatura Arsenales: piden perpetua para 33 imputados

La fiscalía pidió prisión perpetua para 33 imputados en la Megacausa Jefatura II Arsenales. La Secretaría de DDHH requirió que, una vez que la sentencia quede firme, el tribunal envíe un exhorto al Vaticano para que el sacerdote católico José Eloy Mijalchyk sea excomulgado.

  • Agencia Infoto
Por: Gabriela Cruz

Fue una de las audiencias más largas en la ‘megacausa’ Jefatura II Arsenales: duró más de 14 hora y estuvo marcada por la emoción y la ansiedad. Después de cuatro días de alegato, el ministerio Público Fiscal hizo el pedido de pena por las 212 víctimas que estuvieron secuestradas en los dos Centros Clandestinos de Detención (CCD): Jefatura de Policía y Arsenal Miguel de Azcuénaga. Ambos centros formaban parte de lo que se denominó el ‘circuito represivo’ del noroeste argentino. El Arsenal Miguel de Azcuénaga fue, además, el centro de detención y exterminio más grande del país. Así lo indicó el fiscal durante su alocución, citando las pericias realizadas.

Por la tarde, después de leer las imputaciones, los tres miembros de la fiscalía realizaron la solicitud de las penas. La máxima penalidad fue la de prisión perpetua para 33 de los 41 imputados: 13 militares, 14 policías, 5 gendarmes y 1 civil. Las restantes fueron de 25 a 4 años como pena mínima. Los delitos enumerados por la fiscalía incluyen asociación ilícita agravada, privación ilegítima de la libertad, violación de domicilio, torturas, torturas seguida de muerte, homicidio triplemente calificado, violación sexual, abuso sexual y abuso deshonesto. Además pidió que se revoquen las excarcelaciones, que se les dé la baja deshonrosa a los militares, la destitución de los miembros de gendarmería y la exoneración a los policías.

“Tal vez no sepamos nunca qué fue lo último que viste…” leyó el fiscal Patricio Rovira. Entonces los parientes de los imputados se levantaron y se retiraron de la sala. El fiscal continuó con la lectura de los versos, que pertenecen a un poema escrito por Ricardo Salinas (una de las víctimas) dedicado a su hermano, secuestrado con anterioridad. “Nuestra tu alegría” había sido leído en una audiencia en el mes de abril por su hermana Julia Salinas al terminar su declaración testimonial.“…Quizás un nogal centenario, enardecido en la selva. Quizás el sol milenario, arriba de todo. Quizás el negro monstruoso de la venda en los ojos, de los torturados…”, continuó el fiscal emocionando al público que permanecía en la sala.“…Aunque ellos tengan, Dios sabe dónde, tu cadáver. Yo me he quedado con tu risa, y abrazada al fuego casi loco, es nuestra tu alegría”, finalizó el poema escrito en 1976.

Política de Estado
Bernardo Lobo Bougeau y Pablo Gargiullo son los abogados querellantes por la secretaría de Derechos Humanos. Ellos tienen a cargo las víctimas del universo procesal de Arsenal Miguel de Azcuénaga. Pidieron prisión perpetua para 11 de los 21 imputados por ese CCD. Las otras penas fueron de 10 a 25 años. Solicitaron que el cumplimiento se haga en cárcel común y que se les dé la baja deshonrosa a los militares y gendarmes declarándolos infames traidores a la Patria. Lobo Bougeau requirió que, una vez que la sentencia quede firme, el tribunal envíe un exhorto al Vaticano para que el sacerdote católico José Eloy Mijalchyk sea excomulgado.

Ya eran casi las once de la noche cuando terminaron los alegatos de la Secretaría de Derechos Humanos. La explosión de aplausos al grito de “30.000 compañeros desaparecidos. Presentes”, fue la respuesta del público al cierre del abogado Pablo Gargiullo. “La presencia de esta Secretaría de DDHH obedece a una política de Estado respetuosa de los Derechos Humanos”, comenzó el letrado que quiso hablarle a los imputados: “esos mismos DDHH que los imputados violaron y que continúan violando hoy negándose a aportar información”, continuó. Y dirigiéndose al imputado Valdiviezo, que en indagatoria dijo ser una ‘víctima de esta política de Estado que solo sirve para amparar a los terroristas’, le dijo: “yo quiero decirle al señor Valdiviezo que entre esta política de Estado y aquella política criminal y terrorista con la que colaboró, existe una distancia sideral”.

Así empezó a enumerar: “La misma distancia que separa la cama donde duerme el señor Valdiviezo de la colcha hedionda y sucia que tenían por toda posesión los detenidos en Arsenal Miguel de Azcuénaga. La ducha en la que se higieniza y el sanitario donde hace sus necesidades de los baldazos de agua fría que recibieron con la ropa puesta y el campo lleno de espinas donde eran obligados a hacer sus necesidades los desaparecidos. Los medicamentos que recibe el señor Valdiviezo, de las hilachas de estopa y de desinfectante para piso que tenía como todo medicamento el doctor Augier (médico secuestrado en el Arsenal) para curar las heridas de los prisioneros en el Arsenal Miguel de Azcuénaga. La ambulancia que hay en la puerta del tribunal, por si alguno de los imputados se descompone o le sube, la prisión del brazo agusanado por la gangrena de Víctor Zafarov o del cuerpo agonizante y muriéndose de tétanos de Julio César Campopiano sin más atención médica que el consuelo desesperado de todos sus compañeros(…) Es la misma distancia sideral entre este juicio con todos los abogados defensores, con sus jueces con sus recursos y sus garantías de las ejecuciones sumarias que eran llevadas en el Arsenal sin más trámites que arrodillar a un prisionero delante de una fosa, pegarle un tiro en la cabeza y después prenderle fuego”, concluyó.

Pedidos de pena del Ministerio Público Fiscal:
Prisión perpetua para los militares: Camilo Ángel Colotti, Pedro Osvaldo Caballero, Hugo Enzo Soto, Augusto Leonardo Neme, Fernando Torres, Luis Orlando Varela, Mario Miguel D’Ursi, Jorge Omar Lazarte, Luis Orlando Ocaranza, Ramón Ernesto Cooke, Luis Daniel De Urquiza, Adolfo Ernesto Moore, Ramón Alfredo Ojeda Fuente. Para los gendarmes: Ernesto Rivero, José Carlos Sowinski, Benito Palomo, Tomás Adolfo Güemes, Alberto Héctor Rafael Montes de Oca. Para los policías: Roberto Heriberto Albornoz, Juan Alberto Abraham, María Luisa Acosta de Barraza, Miguel Chuchuy Linares, Luis Armando De Cándido, Hugo Javier Figueroa, Oscar Humberto Gómez, Antonio Esteban Versellone, Ángel Custodio Moreno, Pedro José Pasteris, Rolando Reyes Quintana, Ricardo Oscar Sánchez, Guillermo Agustín Ugarte y Félix Insaurralde. Y para el civil Juan Carlos Jesús Benedicto.

25 años de prisión e inhabilitación por el doble de tiempo para Carlos Eduardo Trucco, Ariel Orlando Valdiviezo; 18 años de prisión para Marcelo Omar Godoy; 15 años para Celso Barraza y el cura José Eloy Mijalchyck. Para el policía Ramón César Jodar 12 años; en tanto para los civiles Francisco López Guerrero 13 años de prisión y por el delito de usurpación cuatro años de prisión para María Elena Guerra.

Pedido de penas de la Secretaría de Derechos Humanos:
Perpetua para los militares: Camilo Ángel Colotti, Carlos Eduardo Trucco, Ariel Orlando Valdiviezo, Pedro Osvaldo Caballero, Hugo Enzo Soto, Augusto Leonardo Neme, Fernando Torres, Luis Orlando Varela, Mario Miguel D’Ursi, Jorge Omar Lazarte, Luis Orlando Ocaranza, Ramón Ernesto Cooke, , Adolfo Ernesto Moore, Ramón Alfredo Ojeda Fuente. Benito Palomo

Para el militar Luis Daniel De Urquiza se solicitó 25 años y para los gendarmes Ernesto Rivero, Omar Marcelo Godoy, Tomás Adolfo Güemes, Alberto Héctor Rafael Montes de Oca, José Carlos Sowinski y el civil Juan Carlos del Jesús Benedicto 20 años de prisión. Para Francisco López Guerrero (civil) 18 años y para José Eloy Mijalchyck 15 años. La menor pena fue pedida para el gendarme Celso Alberto Barraza a 10 años de prisión.
 

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