Más de 23 mil personas que pidieron auxilio a la línea 137 por violencia doméstica y abuso sexual fueron asistidas y acompañadas en sus domicilios desde 2006, a través del Programa Las Víctimas contra la Violencia, detalló su titular, Eva Giberti, durante una acto que celebró los nueve años de la creación del Programa.
Desde su creación, el equipo de violencia familiar del Programa Las Víctimas Contra Las Violencias atendió a 23.070 personas en territorio. "El programa es útil e intrépido, opera desde la asistencia pero se opone al asistencialismo, porque evitamos la condolencia con la víctima que la condena a la pasividad y trabajamos para empoderarla en el conocimiento y la lucha por sus derechos", afirmó la coordinadora del Programa Eva Giberti en un acto junto al ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak.
La iniciativa que funciona en la órbita del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, hoy cumplió nueve años y lo celebró con un acto donde Giberti repasó los logros alcanzados. El ministro pidió un aplauso especial para ella, quien tuvo “la valentía de trasformar las ideas para combatir la violencia en una política pública”, dijo y resaltó que la funcionaria “ha jerarquizado esta política pública y ha permitido una toma de conciencia del tema”.
El ministro convocó al compromiso de todos con la temática. “Si no erradicamos la violencia de género y familiar, jamás seremos una sociedad de iguales”, dijo.
En el corazón del Programa funciona la línea de atención gratuita 137 cuyas psicólogas atienden las demandas los 365 días el año durante las 24 horas en la Ciudad de Buenos Aires. Ahí actúa la Brigada Móvil de Atención a Víctimas de Violencia Familiar. “Trabajamos sobre urgencias y emergencias. Lo hacemos bajo dos principios: la emancipación de las víctimas y el trabajo en territorio”, explicó Giberti. Y planteó que "el 38 por ciento de las mujeres que solicitan ayuda al 137 temen denunciar a su agresor, por lo cual hay un subregistro en la estadística" de violencia familiar.
Los números que se aportaron durante el evento son la síntesis de los resultados. En este tiempo el equipo de violencia sexual asesoró a 8.233 personas en comisarías. En tanto que el equipo violencia familiar desde 2008 entrevistó a 30.912 personas en colaboración con actuaciones judiciales.
En cuanto a violencia sexual, "las comisarías son quienes han aprendido a llamarnos, ya que cuando tienen una víctima de violencia sexual están obligados a llamar inmediatamente al Programa, y nosotros vamos a hacernos cargo de las víctimas", explicó la coordinadora.
En su discurso Giberti relató la historia del nacimiento del dispositivo que comenzó a funcionar en el Ministerio del Interior de la Nación, por iniciativa de Aníbal Fernández, actual jefe de Gabinete de Ministros, y por pedido del entonces presidente Néstor Kirchner. En ese sentido, durante el acto Alak convocó a los presentes a un aplauso especial para Fernández y reconoció su “compromiso contra la violencia familiar y la discriminación”.
La titular de Las Víctimas Contra Las Violencias recordó, también, que fue en las oficinas del área donde empezó a gestarse la ley que tipificó el delito de trata en 2008. Durante sus dos primeros años, la Oficina de Rescate y Acompañamiento a las víctimas de trata actuó bajo el ala del Programa.
También contó como fue el proceso de formación de quienes son parte de su equipo: hace nueve años, los profesionales que se postulaban para trabajar no estaban capacitados para entrevistar víctimas de violencias, tampoco a victimarios. “Las universidades venían de darle las espaldas a estos temas. Había que formarlos en género y victimología”, dijo.
El Programa también capacita a todos los aspirantes de la Policía Federal para trabajar en el acompañamiento. Hasta el momento entrenaron a 24.500 personas en una asignatura que dura 4 meses.
Entre los desafíos por venir, Giberti enunció el de "seguir atajando la violencia que se sigue manifestando, particularmente con los chicos víctimas de abuso sexual, y no dejar caer los brazos para seguir enfrentando con las estrategias más operativas las distintas formas de violencias".
El evento terminó con un brindis para celebrar nueve años de actividad intensa e ininterrumpida combatiendo a las violencias y dándole herramientas a las personas que la sufren para que reclamen por sus derechos.
Cómo opera el Programa
Además de un área de "cuidado de los cuidadores", el Programa cuenta con la "Brigada contra la explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes", atenta a ese delito encubierto en el turismo, con el teléfono 0800-222-1717.
El llamado al teléfono 137 puede hacerlo la víctima, un vecino o un familiar, y los profesionales de la Brigada de intervención en urgencias cuentan con cuatro abogadas para asesoría jurídica.
La ley 26.485 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres creó la línea nacional 144 a nivel nacional, que pregunta a quien llama en qué dirección está, y si es en la Ciudad de Buenos Aires, lo deriva al 137. A su vez, fueron creadas otras líneas 137 en Misiones (Oberá y Eldorado) y en Chaco.
La brigada móvil contra la violencia familiar está formada por equipos de psicólogas y trabajadoras sociales que son acompañadas por dos suboficiales de la Policía Federal, que se acercan inmediatamente a la escena de la violencia y acompañan a la víctima a la comisaría y al hospital, en caso de ser necesario.
Cuando se trata de una violación, se recomienda ir a la comisaría más cercana sin bañarse, para obtener pruebas que identifiquen al violador; las comisarías de la Ciudad deben llamar inmediatamente a la Brigada, que acompañará a la víctima a un hospital en el que le suministrarán medicamentos para prevenir enfermedades de transmisión sexual y la píldora del día después.
FA / LC