Fue durante un operativo realizado en la zona norte y oeste del conurbano. La policía bonaerense detuvo a seis integrantes de una banda dedicada al tráfico nacional e internacional de drogas. Parte de la droga, señaló la policía, era enviada a países de Europa.
La localidad de Moreno, en los últimos tiempos, se ha convertido en uno de los centros de acondicionamiento y distribución predilectos de los narcos del conurbano. Anoche, la detención de cinco hombres y una mujer argentinos, y el decomiso de unos seiscientos kilos de cocaína, cuatro vehículos, al menos una pistola 9mm con tres cargadores completos, tres máquinas para sellar al vacío, bolsas y cintas de embalaje de distintos colores y teléfonos celulares, fueron otra prueba concreta.
La operación “Leones Blancos” comenzó hace algunas semanas, a raíz de un dato concreto que llevó a la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Quilmes hasta una quinta de La Reja, en el partido de Moreno, al oeste profundo del conurbano bonaerense. Era una quinta señorial, con una piscina enorme de natación, engalanada con dos enormes leones: aquél detalle cinematográfico le dio el nombre a la operación. Allí se hicieron algunas tareas de inteligencia para determinar exactamente qué pasaba ahí. “En ese lugar se fraccionaba o acondicionaba la droga, que se distribuía por San Isidro”, dijo a Infojus Noticias el fiscal de investigaciones complejas de ese distrito, Claudio Scapolán.
El día de ayer fue un duro golpe para la banda. Desde la tarde, los efectivos antinarcóticos se apostaron en los alrededores de la casa, con mucho sigilo. Una pista les sugería que era una tarde movida. Cuando anochecía, hubo movimientos dentro y de golpe salió una camioneta Mercedes Benz Sprinter con dos hombres a bordo, seguida por un auto particular de vidrios polarizados. Era la custodia: los efectivos no dudaron y fueron tras ellos.
Los vehículos tomaron el Camino del Buen Ayre seguidos por la policía. Unos kilómetros más adelante, se detuvieron, intercambiaron algo –que la policía aún no logro establecer- , y tuvieron un breve diálogo. “Creemos, por la forma en que arrancaron, que allí se alertaron de que los seguían”, contó el fiscal. El tráfico les jugó una mala pasada: en el peaje de la Autopistas del Sol y el Camino del Buen Ayre les cayeron los antinarcóticos.
Allí se produjeron las detenciones de los dos conductores de la camioneta y los tripulantes del auto. Disimuladas en bolsas de nylon, envasadas al vacío, los pesquisas fueron descubriendo lo que llegarían a ser los 550 kilos de cocaína, una cantidad muy importante para las cantidades que suelen incautarse en el mercado clandestino local. “Cuando encontramos los kilos de sustancia en la camioneta, ordenamos un allanamiento de urgencia en la finca de Moreno”, explicó Scapolán.
En La Reja fueron detenidos el resto de los integrantes de la banda, aunque los investigadores no crean que hayan llegado a los estamentos más altos. Son cinco hombres y una mujer, todos argentinos. Hay dos hermanos, que tienen también un vínculo familiar con la mujer. Están domiciliados en Monte Grande, Ciudadela, y tres de ellos en Capital Federal. Dos de ellos se negaron hoy a dar declaraciones ante el fiscal. Además, la policía secuestró otros cincuenta kilos de cocaína, otros dos automóviles, tres máquinas para sellar al vacío, las cintas de colores -que tenían las bolsas y podrían distinguir la pureza, el origen o el destino de la carga-, y una pistola 9mm con tres cargadores llenos. Por eso quienes llevan adelante la pesquisa creen que desde allí abastecían a otras zonas del conurbano.
-¿Cree que también comerciaran al exterior del país?- preguntó Infojus Noticias.
-Es probable. Por la cantidad, y por la manera en la que estaban acondicionados, al vacío, para evitar que el cargamento fuera detectado, que se humedeciera- respondió Scapolán.
A partir de los allanamientos, se abren nuevas líneas de investigación. Sobre todo para dar con el jefe de la organización. En cuanto a los seis aprehendidos, en las próximas horas el juez de garantías n° 4, Esteban Eduardo Rossignoli, deberá confirmar formalmente sus detenciones.