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“Me ilusiona que el sistema penal cambie hacia un nuevo paradigma, pero si las prácticas no cambian nos quedamos girando en el mismo lugar. Por eso es necesario visibilizarlas, cuestionarlas y modificarlas para el goce de los derechos fundamentales”, dijo Alejandra Gils Carbó, procuradora general de la Nación, durante la presentación del Observatorio de Prácticas del Sistema Penal en la sede del Museo Penitenciario.

A la presentación convocada por la Asociación Pensamiento Penal (APP) asistieron también la defensora general de la Nación Stella Maris Martínez, el presidente de la APP, Adrián N. Martín, y la directora del Observatorio de Prácticas del Sistema Penal, Indiana Guereño. En la sala había más de cincuenta personas entre abogados, académicos y periodistas.

“El observatorio tendrá la misión de examinar las falencias del sistema de justicia en base a las incoherencias de las burocracias. Su trabajo es bienvenido porque nos va a mostrar cosas ocultas bajo la luz, a la vista de todos y la tarea es mostrárselas  a todos los operadores de justicia”, continuó Gils Carbó.

Guereño contó cómo surgió la idea de crear una organización que identifique las buenas y malas prácticas del sistema penal. “En el trabajo de Pensamiento Penal nos topábamos con omisiones que distanciaban la ley de la realidad y que diluían los derechos. No había un lugar para quejarse. Entonces decidimos crear el Observatorio para identificar esas prácticas que influyen en el ejercicio cotidiano. Si la práctica es buena podemos replicarla en otras provincias, pero si es mala se convierte en una barrera invisible, en algo que obstaculiza”.

“Hay malas prácticas que son un paredón enorme que ve todo el mundo y otras que son tapiales chiquititos con un subsuelo muy grande. No se trata de convertirnos en policías para denunciar gente sino de trabajar en ver y mirarnos a nosotros mismos”, continuó Guereño a lo cual replicó cordialmente Martínez: “Sí hay algo de policía y de denuncia, pero creo que es necesario porque a todo el mundo le da mucha vergüenza la exposición pública y difundir esas malas prácticas en los medios también tiene una función pedagógica”.

En consonancia con algunas alusiones literarias de Gils Carbó, el presidente de la APP citó a Ítalo Calvino y Gustavo Tabares para aludir las falencias de la justicia. “La mirada del arte y la literatura nos permite iluminar algunos puntos ciegos y pensar ideas sobre aspectos oscurecidos. En su cuento titulado La justicia, Tabares cuenta la historia de dos gemelos que tenían un animal con patas de burro adelante y patas de caballo atrás. Como ninguno quería las del burro decidieron amputar una pata del caballo, pero el animal quedó desequilibrado y para ser justos tenían que seguir cortando. Esta historia impacta por lo absurdo y perverso, pero no nos pasa igual cuando observamos prácticas similares en la justicia, por eso queremos torcerle el cuello a la selectividad del sistema penal”.  

Todos estuvieron de acuerdo en que el Observatorio es un espacio valioso para crear herramientas que mejoren el sistema judicial a través de la crítica constructiva. “Creo que la función de este observatorio es quitarnos la venda de los ojos, venda que no la tiene justicia sino que la tenemos nosotros”, dijo enfática Stella Maris Martínez.

Y agregó: “Creo que debíamos instalarlo y asumir que tenemos de nuevo un rebrote furibundo de ley y orden, que está aumentando la cantidad de detenidos en las cárceles, que el nivel de la justicia está volviendo a descender. Por eso es importante el observatorio, para evitar que la administración de justicia se convierta en un mero abuso de poder”.