"Quedate quieto, perdiste": investigan el ataque al custodio del testigo de lesa
La causa la tiene el fiscal de instrucción bonaerense Matías Di Lello. Según la declaración del policía, el domingo mientras custodiaba la casa del testigo entre seis y siete hombres lo golpearon y le hicieron un simulacro de fusilamiento.El juez autorizó el pedido de filmaciones de cámaras de seguridad de la zona. Ya se tomaron rastros sobre el lugar y se relevaron testimonios de vecinos.
Ilustración: kitsch.
El fiscal de instrucción bonaerense Matías Di Lello interviene en el caso del agente de la Policía Federal custodiaba a un testigo de una causa por delitos de lesa humanidad que terminó herido luego de que lo atacaran el fin de semana en La Plata. Los investigadores pidieron distintas medidas de prueba: analizarán cámaras de seguridad y tomarán declaraciones testimoniales.
El juez federal subrogante de La Plata Jorge Di Lorenzo autorizó el pedido de filmaciones de cámaras de seguridad municipales ubicadas en proximidades de la casa, que había reclamado Di Lello. En el marco de la investigación ya se tomaron rastros sobre el lugar y se relevaron testimonios de vecinos.
Por otra parte, el fiscal subrogante de la Fiscalía Federal N°3 de la capital bonaerense convocó a declarar al jefe de la Delegación Local de la Policía Federal y a los policías que llegaron al lugar tras la denuncia de los hechos. La citación del jefe local de la PFA es para que explique si existían antecedentes previos de ataques similares.
“El fiscal coordinador de distrito Marcelo Molina y la Unidad Fiscal de crímenes de lesa humanidad están pendientes del caso, aunque por ahora no hay elementos para vincular el ataque con las razones por las cuales se dio protección al testigo”, comunicó el sitio www.fiscales.gob.ar. Los funcionarios judiciales pidieron transmitir “tranquilidad”.
"Quedate quieto, perdiste"
El custodio de la Policía Federal baleado es cabo y tiene 30 años. Hace 11 que se desempeña en la fuerza. Ya había trabajado custodiando a otros testigos de causas por crímenes de lesa humanidad. Según su declaración, en la madrugada del domingo, después de las cuatro de la mañana, estaba dentro del Renault 21 con vidrios polarizados asignado a la custodia cuando aparecieron dos autos, un Fiat Sienna modelo viejo y un Chevrolet Corsa, línea nueva.
De los vehículos se bajaron entre seis y siete hombres, uno de ellos portando una Itaka o escopeta.
-Quedate quieto, perdiste-le dijo uno al Policía cuando vio que se bajaba del auto. Lo apuntaron desde atrás y le sacaron su arma reglamentaria.
Después, de acuerdo a la declaración judicial del agente, lo llevaron a un descampado y lo golpearon. "A este cocinalo", escuchó. Lo hicieron arrodillar y le gatillaron pero el policía intentó desviar el disparo. Luchó con su agresor y el arma se disparó. Una bala le atravesó el brazo izquierdo, entre el codo y el hombro, sin tocar el hueso.
El arma quedó en el suelo y fue el policía el primero que la encontró. Mientras los atacantes le disparaban a lo lejos, él se defendió a los tiros. Después del tiroteo, los hombres se fueron.
MFA/RA
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