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“El Viejo” Ariel Maximo Cantero, supuesto jefe de la banda narco Los Monos, tenía pedido de captura internacional. Lo acusaban de asociación ilícita y homicidio. Este mediodía, lo detuvieron en la zona oeste de Rosario por maltratar al caballo que tiraba su carro. Unos policías que vieron la escena le pidieron que se identificara y lo trasladaron a la comisaría para comprobar los datos. Ahí descubrieron que era uno de los prófugos más buscados del país y montaron un megaoperativo para evitar un posible rescate.

“Él iba en el carro con otro hombre. Cuando los policías se acercaron ellos aceleraron el paso y les pidieron que se detengan”, explicó a Infojus Noticias una fuente de la investigación. “Según la policía, el ‘Viejo’ hizo un amague como para sacar un arma y uno de los agentes, que tenía una escopeta antitumultos, le disparó una bala de goma. Él se tiró del carro y el otro hombre se dio a la fuga”, agregó.

Cuando le pidieron que se identifique, el Viejo Ariel dio un nombre falso. Recién en la comisaría, uno de los agentes lo reconoció. Le tomaron las huellas dactilares y confirmaron que era uno de los prófugos de la megacausa en la que fueron condenados, en un juicio abreviado, catorce miembros de la banda.

El supuesto jefe narco fue trasladado a la Jefatura de Policía. Sería indagado por la jueza Alejandra Rodenas entre lunes y martes y luego será trasladado a un penal de la provincia.

Un viejo conocido del hampa

“El Viejo”, de 50 años, es un hombre reconocido en el mundo del hampa. En la década pasada asumió como jefe de la banda cuando su antecesor, Juan Carlos Fernández, alias “El Mono Grande”, murió ahogado en el arroyo Saladillo. Bajo su liderazgo llevó a Los Monos a una sangrienta guerra con Los Garompas, con quienes disputaban robos y el mercado del narcotráfico en la zona sur de Rosario. Una vez vencidos sus rivales, Los Monos se consolidaron como la banda más importante y peligrosa del sur santafesino.

El Viejo Ariel tuvo al menos cinco hijos con Celestina Contreras, condenada en el juicio abreviado a tres años de prisión efectiva. En los últimos años fue cediendo su poder a tres de ellos: el “Pájaro” Ariel Cantero, asesinado a tiros en mayo de 2013; Ariel Máximo Cantero, alias “Guille”, condenado a nueve años; y Ramón “Monchi” Machuca, hijo de crianza, prófugo desde hace dos años y medio.

Uno de los testigos claves que declaró en la causa judicial contó que el Viejo Ariel “manejaba todos los bunker de la zona de Avellaneda desde Segui hasta Circunvalación, eran unos cinco bunker. Él vive en esa zona y tiene a una mujer que tiene dos hijos de él”. La mujer a la que se refiere es Alejandra Amelia Lescano, supuestamente amante del Viejo Ariel, procesada por encubrimiento de las actividades delictivas de la banda. Ella no entró en el juicio abreviado y será juzgada en un debate escrito junto a otras 16 personas, en su mayoría policías acusados de complicidad.

Detenido

En octubre de 2004, el Viejo Ariel fue detenido por la policía rosarina. Lo acusaron de dos homicidios, amenazas coactivas y por una condena pendiente que tenía en la Justicia correntina.

“’Desconfiado hasta de su propia sombra, salvo de su hijo mayor” y dueño de un carácter ‘cerrado y huraño’”, lo definió en aquel momento uno de los policías que le seguía el rastro, según publicó el periodista Sergio Naymark en el diario La Capital. “Amante de la vida al aire libre, las riñas de gallos y los caballos”, agregó.

"A veces se iba desde Rouillón y Circunvalación hasta Las Flores en caballo, bordeando las quintas, para ver a sus hijos y su esposa", dijo un vocero policial al diario. “Muchas veces lo vieron llegar como ciruja, arriba de un carro tirado por un caballo”, agregó, sin saber que más de diez años después la policía lo detendría mientras manejaba un carro a caballo.

SO/RA