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Mar del Plata es una de las ciudades más lindas de la Argentina. Y el Hotel Provincial, uno de los más legendarios del balneario. Desde el lunes y hasta hoy, en sus salones amplios y sus escalinatas alfombradas deambulan estudiantes de Derecho, jueces, funcionarios, fiscales y ministros. Todos comparten las distintas salas del lugar, las comidas, interactúan en la terraza que da a la mítica Bristol, con los lobos marinos de cemento de fondo. Nadie quiere perderse el Congreso Federal Sobre Reformas Legislativas, que pone sobre la mesa cuestiones tan profundas y disruptivas como un nuevo paradigma penitenciario, la sistematización de la normativa contencioso administrativa federal y la búsqueda de un proceso penal ágil y eficiente.

La presencia de diversas figuras de todo el arco político- ideológico fueron uno de los grandes imanes para que todos quisieran venir. El "arco iris", como lo definió el ministro de Justicia y de Derechos Humanos de la Nación, Julio Alak, es una realidad que se plasma a cada paso de los salones que ocupa el Congreso.

Bianca es joven, linda, estudia Derecho en La Plata. Es de Saladillo, en la provincia de Buenos Aires. Vino hasta Mar del Plata para conocer de qué trataba el Congreso, las propuestas que hay. "Me parece buenísimo que se abran este tipo de espacios, porque tiene que ver con lo que estoy estudiando. Y es importante no sólo para mí como estudiante de Derecho, sino para toda la sociedad, que tiene que participar de estos debates”, contó a Infojus Noticias. Como estudiante de Derecho, Bianca cree que la única posibilidad de que la justicia sea justa es que intervenga "el pueblo para transformarla".

María es amiga de Bianca desde chica y está en quinto año de Derecho. Vino porque quería "escuchar diferentes voces. No es fácil que se den este tipo de encuentro en la facultad". Para ella esta fue una oportunidad única de cruzarse en los pasillos y poder oír en los paneles a figuras de la talla de Alejandro Slokar, "me parece que mañana va a ser interesante su participación". La situación de la población penitenciaria es algo que le preocupa, "en el debate carcerlario no siempre se toma en cuenta la perspectiva de la gente que está privada de su libertad".

En un sillón de estilo Luis XV está sentada Matilde Bruera, defensora pública oficial ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nª 2 de Rosario. Fue invitada por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. "Es imprescindible modificar el Código, porque hay que separar el viejo modelo inquisitorio e imponer un modelo acusatorio. Lo que se habla es de una mejor defensa de los derechos humanos de las personas sometida a juicio y también de las víctimas".

Profesor de Derecho Internacional, Agusto Catoggio llegó para escuchar todo lo referente a lo contencioso administrativo, porque tiene que ver con su labor cotidiana. "La regulación es trascendental porque se habla desde gente que lucha por el acceso a la vivienda hasta de trasnacionales. De acuerdo a que perspectiva se le dé al tema, estamos hablando de cosas muy distintas". Otras de las cosas que le llamaron la atención a Catoggio es que "hay un arco ideológico muy amplio y diverso. Y en el público pasa lo mismo. Me parece que es interesante porque en definitva las discusiones lo que te permiten es otorgar mayor legitimidad".

Alejandro Zimmerman es abogado e integrante de la lista Azul y Blanca y quedó muy motivado tras las charlas sobre servicios penitenciarios que tuvo lugar el lunes, primer día del Congreso. Le gustó que especialistas nacionales e internacionales destacaran la importancia de la educación. También le gustó la gente con la que se encontró, "a los que venimos de la abogacía nos resulta muy gratificante encontrarnos con gente de organizaciones politicas, con la presencia de las madres de Plaza de Mayo, abogados de distintas partes. Todo esto nos permite creer que hay otra clase de justicia. jueces que defiendan los intereses de los más necesitados y no que vayan a agarrar a los que roban gallinas".

Marcelo Dominguez es fiscal en Lomas de Zamora y decidió desandas los 400 kilómetros que separan de su ciudad de Mar del Plata "porque me parece bueno esto de que tengan intervención los actores del ejercicio de justicia en cuanto a las reformas legislativas. Es un buen aporte. "Es saludable que se den esos consensos".