Familiares de víctimas que pasaron por el centro clandestino de La Perla contaron cuáles fueron las consecuencias de no encontrar respuesta en la justicia. Un testigo relató que hasta escribió cartas a Jorge Rafael Videla y la OTAN. Mañana continúa el juicio.
En la audiencia 154 del megajuicio La Perla, en Córdoba, familiares de víctimas que pasaron por ese centro clandestino de detención reconstruyeron las circunstancias de los secuestros previos y cuáles fueron las consecuencias de no encontrar respuesta en la justicia . Según contó el fiscal federal Facundo Trotta a Infojus Noticias, abrió la jornada Elena Luisa Muchiutti, que declaró por el caso de su hermana María Inés, quien fue secuestrada el 16 de agosto de 1976. Luego fue el turno de Elba López Carrizo, hermana de Félix, que también estuvo cautivo en La Perla. En tanto, cerró la audiencia Guillermo Birt, víctima sobreviviente del centro clandestino Campo de la Ribera.
Tanto Muchiutti como López Carrizo eran militantes políticos: la primera, formaba parte de la Organización Comunista Poder Obrero, y el segundo militaba en el peronismo. Elena Muchiutti contó que, al momento del secuestro de su hermana, la familia vivía en Santa Fe. "En un primer momento intentamos ocultarles a mis padres la desaparición de Inés, pero fue imposible. Recuerdo a mi madre a los gritos pidiendo por ella y a mi padre con una hemiplejía llamándome para contenerla", dijo ante el Tribunal. María Inés era psicóloga y delegada gremial. Sobre su actividad político, confesó: "Sabíamos que María Ines tenía ideología de izquierda pero no creo que ello sea motivo para que el castigo que recibió".
Después exhibió documentación sobre la búsqueda que hizo la familia: cartas dirigidas a Jorge Rafael Videla y Albano Harguindeguy. Y otras más: "Hay cartas mandadas al Papa, al cardenal Primatesta. En 1980 nos llegó respuesta de la OTAN y la UNESCO. Siempre con resultados negativos”, contó. Sobre lo que se conoce como la "extensión del daño" de estos crímenes sobre la familia de las víctimas, la testigo respondió: "Todo esto destruyó a mi familia. Tengo que decirlo porque mis padres eran gente grande, muy honesta y trabajadora. Mi hermana se había recibido con mucho esfuerzo. Hoy soy la única que queda de la familia. Mis padres y mi hermana mayor fallecieron y de Inés no supimos nada. Sé que esto no es fácil, que hubo muchos desaparecidos, incluso hubiera perdonado si se me hubiera entregado el cuerpo. Porque es lo más doloroso para una familia: no saber dónde está”.
Cuando secuestraron a Muchiutti, su ex pareja Alfredo Eduardo Pérez estaba detenido y sus visitas le contaron de Inés. “Me dijeron que ella tenía una cita con otra compañera en la calle Castro Barros. Cuando esta última llegó al lugar pudo ver cómo varios individuos bajaron de un Torino blanco y secuestraron a Inés. Eso es todo lo que sé”, dijo Pérez, en el juicio.
Luego fue el turno de Elba Hortencia López Carrizo, que declaró por el secuestro de Felix López, su hermano. La familia sólo supo que se lo llevaron los primeros días de mayo de 1977. La pareja de Félix, Elena Feldman, fue secuestrada el 28 de abril de 1977, cuando se la llevaron del departamento que compartía con su madre. Estaba embarazada. "Ellos fueron a casa para Semana Santa y Elenita nos contó que estaba embarazada de dos meses", recordó la testigo.
Antes de terminar su testimonio, agregó un dato que el fiscal mandó a investigar: que desde el área militar Material de Río Cuarto, la familia habría obtenido la información de que Félix estaba muerto y que habían identificado su cuerpo, aunque recibieron también la recomendación intimidante de no seguir averiguando. En ese sentido, explicó: "Mi papá era músico retirado del Ejército y mi hermano estaba en la Fuerza Aérea. En una oportunidad mi mamá sufrió una crisis nerviosa, estaba muy mal, entonces mi hermano estuvo haciendo averiguaciones. Después de eso lo tuvieron secuestrado en Córdoba y lo interrogaron. Mi hermano pidió el pase a Rio IV para estar cerca de mis padres. Pero lo castigaron con destino en San Luis. Y le dieron de baja dos años después. A pesar de que él tenía muy buenas calificaciones en lo que hacía, que era Meteorología. Él también estuvo perseguido".
Por último declaró Guillermo Birt, sobreviviente que estuvo detenido en el centro clandestino Campo de la Ribera. Su caso se agregó en uno de las últimas causas del juicio. Birt contó que el represor que lo interrogó de Campo de la Ribera le dijo que estaba ahí por su militancia. Al día siguiente lo mandaron a la Unidad Penitenciaria 1: allí perdió el riñon por los maltratos recibidos y fue testigo de las aberraciones que se juzgaron en la Causa UP1. Permaneció hasta diciembre de 1976 en la sala de enfermería de la penitenciaría, y de allí lo trasladaron a Sierra Chica. Quedó en libertad vigilada en 1979.
Mañana se realizará la 155ª audiencia en el marco de los hechos que ocurrieron entre 1975 y 1976 en los ex Centros Clandestinos de Detención (CCD) de La Perla, La Ribera y el Departamento de Informaciones Policiales (D2).
El proceso de enjuiciamiento comenzó el 4 de diciembre de 2012 y acumula 25 causas con 52 imputados, entre ellos el ex titular de Tercer Cuerpo del Ejército, Luciano Benjamín Menéndez. Entre los múltiples hechos que se juzgan figuran privación ilegítima de la libertad, imposición de tormentos agravados, aplicación de tormentos seguido de muerte, homicidio calificado, tentativa de homicidio calificado, sustracción de menor de 10 años, abuso deshonesto y violación.