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Infojus Noticias

13-7-2014|12:00|Inundaciones FormosaProvinciales
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Las historias de los afectados por la inundación

Clorinda, la ciudad arrasada por el agua

Los vecinos y las instituciones crean lazos de solidaridad para reconstruir la segunda ciudad de Formosa. Entre ellos, el Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) formoseño se sumó a los organismos de la región para concretar los trámites de los inundados. Los peligros sanitarios del agua acumulada, que tardará meses en bajar.

  • Sol Vazquez
Por: Matías Máximo, desde Formosa

En la cocina de la escuela se turnan para cocinar y ahora le tocó a Elia, que el año pasado fue elegida "reina de los valores" de Clorinda. La elección se hace entre los que participan de los "banquitos" del Programa Nacional del Microcrédito para el Desarrollo de la Economía. Elia puso un kiosko con 3200 pesos. Le fue bien. Pidió un segundo crédito para ampliar y compró un freezer para las bebidas. Como en verano la frontera llega a los 40 grados todos los días vendió mucho. Le fue muy bien y entonces salió reina. Ahora está en el centro de evacuados, con sus cuatro hijos y su freezer.

 
3400 damnificados
 
En la entrada a Clorinda un templo de la difunta Correa está tapado por el agua y las botellas flotan alrededor. La segunda ciudad de Formosa, a 100 kilómetros de la capital, tiene 3400 personas damnificadas por la crecida del río Paraguay, que duplicó su caudal hace un mes. El gobierno nacional anunció beneficios para toda la población afectada en cinco provincias del Litoral por las crecidas y el Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) formoseño se sumó a los organismos de la región para concretar los trámites de los inundados. O´yupi la y', en guaraní, significa que las aguas crecen. Pronostican que recién en noviembre volverá lo seco a toda Clorinda.

"Los beneficios son la duplicación por tres meses de la Asignación Universal por Hijo y Embarazo, de las asignaciones familiares, de la prestación por desempleo y del plan Progresar. Desde el organismo nos acercamos a los centros de evacuados y les explicamos cómo llenar las planillas e incluso se las llenamos a aquellos que no están alfabetizados. Estamos acompañando a los diferentes ministerios y nos plegamos a lo que se precise" dijo a Infojus Noticias Pablo Navarrete, coordinador del CAJ Formosa.

La escuela 302 es un complejo a cien metros de la frontera de Clorinda con Paraguay, que incluye jardín, primaria y secundaria. Desde hace un mes que 64 familias viven en las aulas, pasillos y salones. Porque, a pocas cuadras, las casas se inundaron hasta el techo.

Navarrete los conoce:

-Anses necesita fotocopias de documentos y localizar dónde viven las personas inundadas. Pero eso no es fácil ya que a muchos el agua les llevó todo y tienen que gestionar nuevos DNI. Está pensado que venga el camión del Registro Nacional de las Personas. En algunos documentos la dirección dice "zona esteral". Y zona esteral es tanto acá a la vuelta como a tres cuadras. Ahí está otra de las cuestiones que complica el trabajo. Por eso ayudando a llenar las planillas adelantamos trabajo. El fin de semana pasado completamos más de 200.

En la cocina de la escuela se turnan para cocinar y ahora le tocó a Elia, que el año pasado fue elegida "reina de los valores" de Clorinda. La elección se hace entre los que participan de los "banquitos" del Programa Nacional del Microcrédito para el Desarrollo de la Economía. Elia puso un kiosko con 3200 pesos. Le fue bien. Pidió un segundo crédito para ampliar y compró un freezer para las bebidas. Como en verano la frontera llega a los 40 grados todos los días vendió mucho. Le fue muy bien y entonces salió reina. Ahora está en el centro de evacuados, con sus cuatro hijos y su freezer.

El gobierno provincial firmó convenios con la Nación para la construcción de 1200 situaciones habitacionales, de las que 800 corresponderían a la capital formoseña; 250 a Clorinda, y 150 a las islas de la ribera de los ríos Paraguay y Pilcomayo. Los esteros son como pantanos, brazos espontáneos del río, y ahí es donde está uno de los terrores formoseños: las yarará.

“Instalamos luces porque si a la noche te cruzás una víbora y sin darte cuenta la pisás te pica. Y son venenosas. Si las ves y no les hacés nada se van, pero pisarlas es un terror. Hay muchas”, dijo a Infojus Noticias Blanca Carrera, que tiene 63 años y vive con su marido y sus cuatro hijos.

Desde la casa con chapas de cartón que Blanca construyó junto a la ruta del Puerto Pilcomayo, puede ver su otra casa, la de material, que tuvo que dejar hace un mes. “De acá no nos vamos a mover hasta que el agua baje. Y pronostican que eso recién pasará en noviembre”, dice Blanca, que también habla con un loro parlante que la sigue, suelto, desde que se tuvieron que evacuar. Entre las filas y filas de casas de emergencia junto a la ruta hay muy pocos perros: pero hay gallos, gallinas, cerdos y burros que no se alejan de las personas que los socializaron.

Además de traer comida, los gendarmes pasan una vez por día y se llevan la ropa: la devuelven limpia y perfumada.

Silvana Báez tiene 27 años y creció en Clorinda, pero desde que atiende en el CAJ se mudó a la capital formoseña para no tener que viajar cien kilómetros todos los días. Ella también ayudó con el trabajo de las planillas de la Anses. Se mueve con cancha por la tierra y los atajos mientras la saludan: “En Clorinda se conocen todos”, dice. Al trabajo territorial se sumó la abogada Valeria Ortellado, de la editorial Infojus, para colaborar con los evacuados y asesorar si se lo piden. La dialéctica judicial se resignifica en la inundación: no hay “palacio” de tribunales, ni “corte”, ni “señorías”. Hay barro, botas de goma y Justicia que se traslada.

Azucena del Valle Santillán, una referente barrial y directora de la agrupación folklórica Aguas del Pilcomayo, maniobra su auto por las calles barrosas de Clorinda e indica dónde, cómo, por qué:

-Hace unos 20 años se hizo la barrera de contención para que el agua no pase de la zona inundable. Pero de todas formas, desacostumbrados a que el río suba tanto, las personas hicieron sus casas de ese lado. Por alguna razón las bombas que extraen el agua funcionaron parcialmente y entonces algunas partes se inundaron feo. A veces hay baja tensión y no tiran. Es difícil que el agua que se acumuló baje y eso llevará tiempo y paciencia. ¿Cómo se dice en guaraní 'las aguas suben'? O´yupi la y'.

El jefe de Gabinete Jorge Capitanich comunicó el viernes que hay 4910 afectados por las inundaciones según el relevamiento del gobierno nacional. Después de una reunión con el comité de emergencia hídrica nacional, Capitanich dijo que se decidió "mantener la zona de alerta" por el pronóstico de lluvias y relevar las "áreas críticas del río Paraguay por la crecida de la cuenca media y alta". El último informe del Instituto Nacional del Agua indica lluvias entre 20 y 40 milímetros en la cuenca baja del río Paraguay. Pronostican para la semana lluvias leves a moderadas en la cuenca media-alta.

Las inundaciones también llegaron a Corrientes, Misiones, Entre Ríos, Chaco y Santa Fe. Desde la cartera de salud formoseña destacaron la asistencia en los centros de evacuados de Formosa, Clorinda, Herradura, Banco Payagua, las Islas Apando y Buey Muerto: "No se registran casos de gravedad".

En la ruta los aguiluchos enfrentan a los autos: para pasar hay que tocarles bocina porque no se mueven y chocarlos es un radiador en llamas. A los costados, todo el tronco de las palmeras está cubierto hasta que parecen arbustos. Las rutas del litoral son un hilo flotante que se resiste a la incomunicación. “Sacás el agua de los esteros y la mandás al río. ¿Pero si el río se desborda a dónde vas a meter el agua?”, dice Azucena y navega por sus preguntas retóricas. Al costado de la frontera, que es un ida y vuelta de paquetes y paquetitos, el regimiento de bomberos de Paraguay está inundado.

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