El calentamiento de una máquina podría haber sido el origen de la explosión producida el jueves a la noche en la planta química de barrio Alta Córdoba. La misma causó más de 60 heridos. La hipótesis se desprende de un informe que elaboró Bomberos por orden de la Justicia.
En las últimas horas, nuevas pericias arrojaron más precisiones sobre la explosión en una fábrica cordobesa. La detonación ocurrió cerca de las 21 del último jueves en la planta ubicada en Avellaneda al 3000 de barrio Alta Córdoba, a unas 30 cuadras del centro de la capital cordobesa, causó más de 60 heridos, dos al menos de gravedad, y daño y destrucción en numerosas viviendas.
Según reveló radio LV3, los peritajes descartaron un cortocircuito y confirmaron que la explosión se produjo en el interior de la fábrica y al parecer en el patio, donde quedó un profundo cráter. Asimismo, las pesquisas preliminares revelaron la presencia de productos inflamables como alcohol etílico, pese a que la fábrica no tenía autorización para almacenar este tipo de sustancias.
La causa está a cargo de la fiscal Eve Flores, quien ordenó la detención del dueño de la planta, a quien acusó de "estrago culposo agravado". Según adelantó ella misma, le tomará declaración en los próximos días, luego que cuente con el informe final de Bomberos.
De las personas internadas desde el momento de la explosión, presentan mayor gravedad Pablo Amaya, de 15 años, quien permanece alojado en el Hospital de Urgencias, y María Angelina Cueto, de 64 años, que está siendo asistida en un centro de salud privado.
La responsabilidad de la empresa
Con 35 años de experiencia en desarrollo de químicos para higiene y limpieza (eso dice su página oficial), la empresa contaba con habilitación municipal para acumular solamente material “no inflamable”. Pero entre los escombros se hallaron varias cajas de alcohol líquido, que, según una fuente vinculada a la investigación, estaba en “malas condiciones de mantención”. La fuente dijo que "había material inflamable, que excedía los límites", en referencia a la habilitación.
La fiscal dijo que llegó a la imputación del dueño de la fábrica analizando el “material documental” y confirmó que se encontró alcohol en el predio, aunque no amplió si había más productos inflamables. “En este caso analizamos la responsabilidad subjetiva del actor, es decir quién es el que realizaba la actividad peligrosa que tuvieron resultados extremadamente graves y causaron conmoción pública”, dijo, en referencia a que no se encuentra imputada la otra persona que figura como titular de la empresa.