Esteban Gerold fue atropellado por una moto el 8 de diciembre de 2013 y murió internado. Testigos dijeron que quien lo embistió era una de las personas que saquearon un frigorífico. Ahora detuvieron a un hombre que podría estar involucrado en la causa por “homicidio culposo”.
Esteban Gerold estuvo 27 días en coma luego de ser embestido por una moto. Durante esos días su papá tuvo una certeza: quien lo atropelló fue uno de los saqueadores de un frigorífico santafesino, que estaba escapando del lugar. Se lo dijo la persona que auxilió a Esteban minutos después del accidente y ahora la justicia podría darle la razón. Esteban falleció el domingo y esta mañana hubo un allanamiento ligado al caso y hay una persona detenida.
Por el caso de la muerte de Esteban hay una causa en el Juzgado Correccional N° 3 (que primero fue caratulada como “lesiones culposas” y tras su muerte se re caratuló como “homicidio culposo”) y por los saqueos, otra en el Juzgado de Instrucción n° 4. Ambos están en receso.
“Yo lo que hice como juez de feria fue ordenar un allanamiento esta mañana y allí se produjo una detención”, explicó el juez de Primera Instancia de Distrito en lo Penal de Instrucción de Santa Fe, Jorge Patrizi. Si bien explicó que no podía dar mayores precisiones del caso, dijo que “podía haber una relación” entre el detenido y la muerte de Esteban.
“Hicimos un allanamiento en un domicilio particular porque el padre de Gerold aportó un apodo y un apellido y una dirección probable aproximada, averiguamos bien la dirección y trajimos a este hombre, que está por robo calificado en poblado y en banda. Encontramos elementos que son del frigoríficos, ya los reconoció el dueño del frigorífico, una balanza y salamines. Trajimos dos motos grandes y tenemos que peritarlas. Faltaría algún testigo. El papá dice que tiene un testigo, pero nunca apareció. Estamos esperando al testigo hace semanas, pero no vino, capaz le ganó el miedo, por esas cuestiones del barrio”, dijo a Infojus Noticias, un efectivo de la comisaría 6° que intervino en el caso.
La noche del domingo 8 de diciembre Esteban, de 38 años, volvía contento a su casa después de haber ido a visitar a un amigo. Iba en su moto escuchando música con los auriculares de su celular. Poco parecía importarle la tormenta que había empezado a caer sobre Santa Fe, la ciudad donde vivía. Hasta que en la esquina de Ecuador y Brasil una moto de mayor cilindrada se lo llevó por delante. Esteban voló por el aire y dio de lleno contra el asfalto, donde quedó con la cabeza partida. El conductor de la otra moto agarró todo lo que se le había caído y se fugó.
“La persona que auxilió a Esteban y que vio como fue todo me explicó que la persona que lo atropelló venía de saquear el frigorífico Ubiergo, que está a unos metros de donde fue el choque. El tipo venía en la moto con una balanza y muchos chacinados. Juntó todo lo que se le cayó cuando chocó y se fue. Era uno de los saqueadores”, dijo Rubén Gerold, papá de Esteban, a Infojus Noticias. Esos elementos serían los que la policía encontró hoy durante el allanamiento.
“Cuando este vecino estaba ayudando a mí hijo, después de que el saqueador se fuera, vinieron otros que se acercaron diciendo que conocían a mi hijo y le robaron todo: celular, billetera, documentos, zapatillas”. Fue por eso que cuando la ambulancia trasladó a Esteban al hospital de Emergencias José María Cullén, ingresó como N.N y su papá recién se enteró de lo que le había pasado al día siguiente. “Yo esa madrugada me desperté cada una hora, preocupado porque Esteban siempre que se retrasaba, avisaba. Había tormenta y habían empezado los saqueos”.
Cuando Rubén finalmente supo qué había pasado con Esteban, lo pudo ver en terapia intensiva. “Estaba inconsciente, con traumatismos de cráneo y cara. Desde entonces me aboqué a su estado de salud. Apenas pude fui a la comisaría 6° pero me dijeron que si el testigo no iba ahí a declarar o a la justicia, no podían hacer nada. Y el hombre que vio todo tenía miedo y no quería declarar”, explica en la casa donde habla de los tres hijitos de Esteban (dos varones, de 12 y 11 y una nena de 8) y donde esta tarde recibirá un abogado que lo ayudará con la causa. Su objetivo es uno y lo tiene claro desde el principio. “No quiero que la muerte de mi hijo quede como un accidente común. Fue producto de los saqueos y yo confío en la justicia, sé que puede ser lerda, pero confío en que va a llegar”.