Los padres de Cassandre y Houria actúan como querellantes. Hay cinco imputados: tres por el homicidio, robo y violación de las jóvenes y otros dos por encubrimiento. Los acusados dicen que son "perejiles" y que fueron forzados a confesar por la policía.
El 29 de julio de 2011, los cuerpos de Cassandre Bouvier, de 29 años, y Houria Moumnie, de 23, fueron encontrados en un centro turístico a doce kilómetros de la ciudad de Salta. La reconstrucción dice que Cassandre fue violada por dos hombres, cortajeada con un machete y rematada de un escopetazo en la cara. Houria, después de que un hombre la violara, intentó escapar y le dieron dos tiros en la espalda, que a la hora de agonía le causaron la muerte. Tras un proceso que duró casi tres años, hoy comienza el juicio oral con las declaraciones de los padres de las jóvenes.
Los tres principales imputados para los que la fiscalía pide prisión perpetua también tendrán derecho a declarar. La Sala II del Tribunal de Juicio local, que preside el juez Angel Amadeo Longarte e integran los jueces Bernardo Antonio Ruiz y Carlos Héctor Pucheta, está llena de periodistas argentinos y franceses. Más de 200 testigos declararán durante las audiencias, en las que se juzgará a Gustavo Orlando Lasi, Daniel Octavio Eduardo Vilte Laxi y Santos Clemente Vera, bajo la imputación de doble homicidio calificado criminis causa con abuso sexual agravado y robo calificado en concurso real. También serán juzgados Omar Darío Ramos y Antonio Eduardo Sandoval, que están imputados por encubrimiento calificado. Todos ellos a la derecha del estrado, tendrán la posibilidad de declarar antes que lo hagan los padres.
En Salta existen otras teorías a la reconstrucción oficial del crimen. Que las chicas estaban en una fiesta privada que suele hacerse en la reserva, que los imputados son perejiles para encubrir a los hijos del poder, que la provincia puso a cualquiera tras las rejas para darle a la sociedad un culpable. “Ninguna de esas versiones pudo ser acreditada durante la fase de instrucción” dijo a Infojus Noticias Marcelo Báez, vocero del Poder Judicial de Salta. La quebrada de San Lorenzo está a 12 kilómetros de la ciudad y es un lugar muy visitado por los turistas, que recorren unos dos kilómetros de senderos rodeados de vegetación para llegar a un mirador con vista panorámica. El registro de ingresos de la reserva dice que las jóvenes entraron a la reserva el 15 de julio a las 16.23, dos semanas antes que se encontraran sus cuerpos. En ese libro de registros figura que, cinco minutos después, ingresaron cuatro personas de la provincia de Córdoba y esa es la anotación que se supone agregada para desviar la investigación por Walter Lasi, padre de Gustavo y encargado de limpieza y mantenimiento del sendero de la reserva en el momento del crimen.
Jean Michel, Nestor Charles Bouvier, Hélene Olga Ontoinette Kottak, Florian Diego Fabrice Bouvier, Alienor Marianne Clelia Bouvier, Lahoucine Moumni, Zohra Moumni, Fatima Moumni, Fadil Moumni, Nora Moumni, Nadia Moumni y Majad Moumni, familiares de las turistas, están constituidos como querellantes conjuntos y son representados por el apoderado Nicolás Durrieu y el patrocinio letrado de los abogados Federico Rodríguez Spuch y Nicolás Ortíz.
Jean Michel, padre de Cassandre, transformó su dolor en lucha y se puso como objetivo que la figura de femicidio sea incluida en el código penal de Francia. Después de reunirse con la presidenta Cristina Kirchner, a la que le pidió que se erija un monolito en el lugar del crimen para representar la unión entre Francia y Argentina. Jean Michel tuvo el homenaje que deseaba y cada vez que viene al país grupos de padres de víctimas se acercan a él para acompañarlo en su reclamo de justicia.
Vilte Laxi será defendido por el letrado Marcelo Arancibia, mientras que el abogado José Vargas tendrá a su cargo la defensa técnica de Vera y sus pares Matías Adet y Horacio Morales harán lo propio con Lasi. La representación de los imputados Ramos y Sandoval está a cargo de la defensora oficial, Graciela Belmont. El fiscal en la causa es Félix Elías.
Los principales imputados
Gustavo Orlando Lasi tiene 27 años y confesó que estuvo en el sitio del crimen, en una imprevista declaración luego de que un estudio constatara que era suya una muestra de semen. Lasi también dijo que Vilte y Vera, después de golpear y abusar de las francesas, lo obligaron a violar a Moumni a punta de pistola. Los psicólogos forenses confirmaron que es imputable y le adjudicaron un "doble discurso" y una "doble moral", además de ser "psicópata, frío, manipulador y de lenguaje perverso".
Según un informe realizado por la Universidad de Buenos Aires, las dos turistas fueron violadas por Lasi, que solo confesó haber abusado de Moumni y negó haber estado en el lugar en el momento de la ejecución de las víctimas. Vilte Laxi tiene 26 años, es albañil y primo de Lasi. Fue de los primeros detenidos, porque intentó vender un arma con características similares a la utilizada para matar a las turistas. En sus primeras declaraciones dijo que actuó como "intermediario" en la entrega del arma, pero que ni siquiera la tocó. También dijo que el 15 de julio estuvo en su casa viendo televisión, aunque se contradice con su esposa, que declaró que entre las 6 y las 8 de la noche ella estaba en el supermercado y él no estaba.
De acuerdo a las pericias psicológicas, Vilte Laxi muestra características "psicópatas" y es "frío, adicto (al paco), alcohólico, transgresor y sin sensación de culpa". El informe también dice que tiene "antecedentes" de alcoholismo en la familia. A más de un año del crimen, Laxi escribió una carta en la que se declara inocente y denuncia que fue torturado por la policía para que se hiciese cargo de las muertes. "La Brigada me torturó desde las 5 de la tarde hasta las 10 de la noche", escribió, y dijo además lo amenazaron para que se hiciera cargo: "Si no lo hacía iban a matar a mi señora y a mis hijos, pero yo no lo voy a hacer porque soy inocente", dice la carta. Laxi dice que su primo "es el único que debe saber quién o quiénes son los verdaderos (culpables) y él de cobarde me metió en esto pero Dios sabe que soy inocente". Vilte Laxi tiene tres hijos, de 6, 4 y 3 años. Santos Clemente Vera tiene 38 años y era jardinero y empleado de seguridad de la reserva en el momento del crimen. Le decomisaron un machete presuntamente compatible con las heridas cortantes halladas en los cadáveres de las francesas. En las pericias psicológicas señalan que "no habla espontáneamente; piensa cada palabra y tiene doble discurso y doble moral".
"Por qué nos hacés comer este garrón!", "a quién encubrís, hijo de mil puta!", fueron algunas de las frases que él y Vilte Laxi le gritaban a Lasi tres semanas después del hallazgo, durante la reconstrucción del crimen en la reserva.