La chica de 15 años negó ante la fiscalía lo que declarara su amiga horas antes: que había huido con su novio. Dijo que no pudo ver la cara a sus captores y que la retuvieron en una casa en construcción antes de dejarla en un descampado en Cañuelas.
Karen Mendoza la joven de 15 años que estuvo desaparecida 16 horas y apareció ayer, declaró ante la UFI N°8 de La Matanza, a cargo de Alejandra Núñez. La chica relató que después del mediodía del martes salió de su casa en Virrey del Pino comprarse una campera y que en el camino fue interceptada por dos hombres encapuchados que la subieron por la fuerza a un auto
“Dijo que no le pudo ver los rostros y que después de haberla llevado a una casa o una construcción, donde se resistió a que le hicieran algo, la dejaron en un descampado”, dijo a Infojus Noticias una fuente de la fiscalía. Durante su desaparición, mandó mensajes de texto a su madre pidiendo auxilio. En ellos relataba que había sido secuestrada y que iba a bordo de un auto rojo donde era maltratada.
Las pericias médicas establecieron que no tenía golpes, ni lastimaduras.Tampoco presentaba rastros de abuso sexual. Lo único que llamó la atención fue una marca en una de sus muñecas, pero establecieron que era previa al momento en que desapareció.
A las 8:40 de ayer una vecina de Los Pozos, un barrio en las afueras de Cañuelas, reconoció a Karen. La chica iba caminando por el borde de la ruta 3, cerca del kilómetro 50. La mujer había visto una foto de la joven; se la habían mostrado los policías que rastrillaron el lugar. Tras la denuncia de su madre, la justicia había pedido que amigos y familiares de Karen se presentaran a brindar testimonios a la espera de que algún dato pudiera echar luz sobre lo que podría haber pasado.
En un momento de la noche, una amiga de la menor le contó a la policía que la chica le había pedido que la acompañe al kilómetro 50 porque iba encontrarse con Matías, un novio que tenía, y que manejaba un auto rojo. En sede judicial, Karen negó este testimonio pero la similitud entre el lugar y el vehículo en el que apareció y fue secuestrada, no pasó desapercibida.