Según un informe policial, Beatriz Lafuente admitió en la DDI de Quilmes la autoría del crimen. "Había golpeado a la menor y al despertar al otro día, constató que se encontraba sin vida". Hoy se negaron a declarar ante el fiscal Carlos Riera. Los detalles de la investigación.
El fiscal del Departamento Judicial Quilmes, Carlos Riera, a cargo de la investigación por el crimen de Priscila, confirmó a Infojus Noticias que les tomó declaración indagatoria a los padres de la nena, únicos detenidos hasta el momento por el brutal homicidio. Sin embargo, esta tarde, ambos se negaron a declarar ante Riera, que los indagó como coautores del delito de "homicidio calificado".
Tanto la madre, identificada como Silvia Beatriz Lafuente, como el padrastro, un bombero de la Policía Federal pasado a disponibilidad llamado Pablo Verón Visconti, fueron detenidos anoche luego de que éste aparentemente "se quebró" en sede policial.
La autopsia que le practicaron al cadáver de la niña esta mañana reveló que Priscila murió como consecuencia de múltiples traumatismos en el cuerpo, y que las quemaduras que presentaba el cuerpo fueron realizadas post mortem.
Verón Visconti les dijo ayer a los policías que Lafuente "cagó a palos" a la niña durante la noche del pasado viernes 3 de enero, que luego la acostó a dormir y que, ya durante la mañana del sábado 4, la fue a despertar y la encontró muerta. El padrastro de la niña dijo que tomó el cuerpo de Priscila e intentó quemarlo en la parrilla de la casa para eliminar pruebas del delito, aunque al no conseguirlo decidió envolverlo en una bolsa de plástico y esperar a la noche para descartarlo, relataron las fuentes.
Mientras buscaban a Priscila, de siete años, los testimonios de los vecinos del barrio Las Manzanas de Berazategui -donde vivía la nena junto a su familia- llevaron a los investigadores a poner el foco en su círculo íntimo. Después del hallazgo del cadáver, la madre declaró en la DDI de Quilmes y confesó el crimen.
"Había golpeado a la menor y al despertar al otro día constató que se encontraba sin vida, por lo cual decidió llevarla a una parrilla que se encuentra en los fondos de la vivienda, rociarla con kerosene y prenderla fuego, colocándola posteriormente en una bolsa y arrojándola al arroyo", dice un informe policial al que tuvo acceso Infojus Noticias.
Riera ordenó la detención de Lafuente y de Verón Visconti. Ella está acusada del delito de homicidio calificado agravado por el vínculo. Él, por encubrimiento. La confesión de la mujer, realizada en sede policial, no tiene valor judicial.
La prueba fundamental que involucra a la pareja es una filmación de una de las cámaras de una estación de servicio ubicada entre la casa familiar y el lugar donde fue hallado el cuerpo. "Se observa a la progenitora de la menor, junto a su concubino y dos de sus hijos, uno de ellos cargando a un bebé, otro con un carrito de bebe, el cual se hallaba tapado con una manta", dice el informe.
"Confesaron la autoría y las pruebas son incontrastables”
Esta madrugada, efectivos de la DDI de Quilmes y de la Comisaría 4 de Berazategui allanaron la casa en la que vivía Priscila junto a su madre y Visconti. Allí secuestraron ropa con manchas de sangre y el cochecito en el que habría sido trasladado el cadáver de la nena. En la vereda, además, los policías hallaron varias bolsas para residuos con cenizas, pelos y fibras que deberán ser sometidos a análisis para constatar si coinciden con el ADN de Priscila.
Lafuente y Visconti pasaron la noche en la DDI de Quilmes. Esta mañana fueron trasladados a la fiscalía de Berazategui, donde fueron indagados por el fiscal. “Ellos confesaron la autoría y las pruebas son incontrastables”, explicó una fuente policial a Infojus Noticias. El hecho de que hayan transcurrido 38 horas desde que la niña supuestamente desapareció hasta que su familia radicó la denuncia, junto al testimonio de los vecinos, que contaron que la nena "era maltratada bruscamente con golpes de puño por parte de su progenitora a diario", fueron los elementos que llamaron la atención de los investigadores.
En el patio de la casa, separado de la calle por una medianera de menos de dos metros, está la parrillade ladrillos destruída donde habría sido quemado el cuerpo de Priscila. Allí hay restos de objetos quemados: el respaldo de una silla, baldosas. "El viernes o el sábado, a eso de las siete de la mañana, que es la hora que se levanta mi hijo, salimos al patio y sentí un fuerte olor a carne quemada", contó una vecina a Infojus Noticias.
La madre de Priscila denunció la desaparición de la joven el sábado pasado. "Se la buscó por todos los lugares donde podía estar viva. Y en las primeras horas, cuando no se la pudo encontrar en esos lugares, se empezó a revisar campos y arroyos", indicó el comisario general Osvaldo Castelli, titular de la Superintendencia de Seguridad de la Policía de la provincia de Buenos Aires. Ayer a la mañana el cuerpo de la niña fue hallado en el arroyo Las Conchitas, en un lugar de "difícil acceso". El comisario dijo que el cuerpo de la niña "se encontraba dentro de una bolsa y a primera vista surgiría que tiene signos de haber sido calcinado".