Tras 22 horas de alegatos, esta mañana terminó la última audiencia de este proceso que se enmarca en la megacausa por irregularidades en el Registro de la Propiedad que ya superó los 100 condenados a los largo de 30 juicios.
Mañana se conocerá la sentencia del juicio que tiene como principal acusado al empresario multimillonario cordobés Jorge Petrone y a sus colaboradores por usurpación de títulos. Es el marco de la megacausa por irregularidades en el Registro de la Propiedad de Córdoba. Tras 22 horas ininterrumpidas de alegatos, esta mañana terminó la última audiencia de este proceso. La megacausa lleva 8 años de investigación, y ya superó los cien condenados a lo largo de una treintena de juicios.
Los alegatos empezaron a las nueve de la mañana de ayer, con la participación del fiscal del juicio, Pablo Sironi. También asistió el fiscal de instrucción, Enrique Gavier, a cargo de la investigación previa, y que continúa tratando de dilucidar los centenares de operaciones fraudulentas realizadas entre 2003 y 2006. La audiencia prometía durar hasta entrada la madrugada. Pero a las once de la noche, cuando comenzó el último alegato –el de la defensa- nadie imaginaba que se extendería hasta las siete de la mañana.
La fiscalía del juicio había bombardeado al magnate Petrone con argumentos que probaban su responsabilidad en las operaciones fraudulentas con las que se hizo de más de sesenta hectáreas de tierra en forma ilegítima. Su abogado Marcelo Brito quiso contraatacar y en su discurso sólo le faltó insultar al fiscal en forma directa. Entre réplicas y contraréplicas ante la Cámara del Crimen Nº 10, se hizo de día y seguían discutiendo.
Hoy el tribunal y las fiscalías estaban vacíos: magistrados, fiscales y colaboradores descansaban para llegar atentos a mañana temprano, cuando se conocerá la sentencia. Petrone durmió en un calabozo, por primera vez en el juicio. Al cierre de la audiencia los jueces ordenaron detenerlo, concediendo la solicitud del fiscal de otorgarle prisión preventiva. En muchos juicios, e incluso en uno de esta megacausa, los culpables se fugaron horas antes de que se conocieran sus condenas.
Según lo que investigó Gavier, Petrone se hizo de 63 hectáreas en forma ilegal, mediante su compañía constructora e inmobiliaria Gama, un ícono cordobés responsable del desarrollo de más de quince barrios privados y torres fastuosas en distintas localidades de la provincia. Las tierras en litigio están ubicadas en la ruta 20, entre la capital provincial y Carlos Paz, fueron arrebatadas a su verdadera dueña en una maniobra en la que se fraguaron escrituras y folios registrales. Susana Munist perdió su propiedad cuando un funcionario del Registro arrancó la página en la que constaba su título y la reemplazó por otra falsa a nombre de Agustín Lapacó. Luego la compró Diego Oxandaburo a precio vil –noventa mil dólares-, y se la transfirió a Petrone por una suma exorbitante –casi un millón de dólares-.
Petrone se escuda en ese pago para sostener que fue un comprador de buena fe, ajeno a la maniobra fraudulenta, pero sería inminente la condena. Títulos fraguados, inversiones inmobiliarias y curiosas transferencias de dinero circulando entre los imputados, llevaron a que el fiscal lo acusara de instigador y partícipe necesario del delito de falsedad ideológica continuada y reiterada por usurpación. Pidió cinco años y medio de prisión para él, cuatro y medio para Oxandaburu, y tres y medio para Oscar García –el tesorero de Gama-.
La megacausa
Cientos de denuncias, centenares de testigos, 33 juicios orales, más de sesenta expedientes distintos, y audiencias eternas. Funcionarios, abogados, escribanos, magnates, corredores inmobiliarios y hasta un ex intendente involucrados. Las operaciones investigadas se cuentan de a centenares y sucedieron entre 2003 y 2006. El primero de esos años, el titular del Registro era Jorge Belmaña Juárez, detenido con prisión preventiva y protagonista de un nuevo juicio que comenzó en los últimos días de diciembre.
Ricardo Scoles, ex intendente de Villa del Dique y ex legislador provincial, fue condenado a cuatro años y tres meses de prisión efectiva en el juicio que repartió condenas para otros dieciséis acusados, entre los que había varios funcionarios del Registro. Ya son más de cien los condenados en los 33 juicios orales, en base a las más de trescientas operaciones investigadas por los fiscales de instrucción.
José Rodolfo Sabagh, uno de los empresarios inmobiliarios más importantes de la provincia -que en el juicio declaró poseer un patrimonio superior a los cuarenta millones de dólares- fue condenado a cinco años de prisión, que purga en su domicilio dada su avanzada edad. Es un condenado más entre los tantos que se hicieron de campos y terrenos valuados en varios millones de dólares. En varios casos, la operación terminaba con una compra millonaria de las tierras por parte del Ejecutivo provincial, aunque de esa rama de la megacausa aún no se conocen muchos detalles.
El tribunal estimaba tener la sentencia para diciembre, pero el proceso –que comenzó hace tres meses- se fue demorando. Ante las maniobras dilatorias de los abogados defensores, los jueces extendieron las jornadas de audiencias testimoniales hasta la medianoche. Por eso también habilitaron la feria para continuar el proceso y anoche decidieron no interrumpir la audiencia con un cuarto intermedio. Brito, el abogado de Petrone, esperaba que la sentencia no llegara antes de febrero.