Infojus Noticias

En el pueblo de Chacabuco, una ciudad de 40 mil habitantes del noroeste de la Provincia de Buenos Aires, los vecinos aún no se lo explican: un chico de 11 años fue brutalmente asesinado. El cadáver, identificado como Ángel Nahuel Bortnik, fue encontrado en un descampado ubicado en la calle Fuerza Aérea, entre Laprida y Liniers.

El fiscal Daniel Nicolai, titular de la Unidad Fiscal 11 de Chacabuco, confirmó a Infojus Noticias que la policía detuvo a tres hombres, que serían hermanos entre sí. “Tendrían entre 60 y 70 años, son de apellido Ferrari y se dedicarían al cartoneo. Hay testigos que vieron cómo vivían en un lugar donde habría estado la víctima. Estamos investigando los posibles nexos entre los hombres y algunos familiares del niño. Pero no podemos decir nada del móvil todavía”, dijo.  Según se desprendería de la investigación, los sospechosos pernoctaban en una precaria casilla al lado del descampado, que, a su vez, estaría a unos metros de la casa donde vivía el menor.

El fiscal confirmó que la autopsia fue contundente: al niño lo mataron de un golpe en la cabeza, con un caño  galvanizado de una bomba de agua. Lo habrían matado en el mismo lugar donde fue encontrado el cuerpo: sobre el pasto también quedó una gran mancha de sangre. Los investigadores secuestraron el arma asesina, que tendría manchas de sangre y cabellos pegados de la víctima. El fiscal caratuló la causa como "homicidio agravado con alevosía”.

Una de las líneas de la investigación apunta a determinar cómo el chico, que vivía con un tío, habría desaparecido de su casa hasta ser asesinado. El dato no sería menor: en la madrugada del domingo, familiares denunciaron su desaparición en la comisaría primera de Chacabuco.  Ángel había desaparecido el sábado.  El fiscal  Nicolai, dispuso un allanamiento de urgencia avalado por la jueza de garantías 3 de Junín, María Laura Durante.

Los efectivos de la jefatura distrital local hicieron el restrillaje en un terreno lindante a la casa del tío de la víctima, donde tres hermanos viven en unas precarias casillas de chapa."Son cuatro habitáculos que no tenían ni baño, en uno había una cocina y en el resto estaban los camastros en los que dormían", dijo a Télam un jefe policial encargado de la pesquisa.

La policía inspeccionó en el lugar hasta que en un cañaveral, que los hermanos utilizaban como baño, encontraron el cuerpo del chico, agregaron las fuentes.

"En principio, la médica que realizó la autopsia en Junín cree que ese elemento hallado en una de las casillas pudo haber sido utilizado en el crimen porque es compatible con la herida que presentaba Angel", dijo a Télam el fiscal Nicolai.

Los policías secuestraron ropa  con manchas de sangre que pertenecen a uno de los hermanos, aunque todas las pruebas recolectadas serán peritadas a través de exámenes de ADN.

Respecto del móvil del homicidio, los investigadores no descartaron todavía la hipótesis de un intento de "abuso sexual" y se investiga si Angel tuvo en alguna ocasión "problemas" con los hermanos.

Los detenidos fueron identificados como Rubén (63), Adolfo (66) y Edgardo Ferrari (68), quienes vivían del cirujeo. En un principio había sido demorado la pareja de la madre del menor muerto, pero luego quedó en libertad.

Los tres hermanos se negaron a declarar ante el representante del Ministerio Público que los indagó por el delito de "homicidio agravado por alevosía", que prevé una pena de prisión perpetua.

Ante esta situación, el fiscal Nicolai pedirá en las próximas horas a la jueza de garantías la conversión de la aprehensión en detención de los sospechosos, como presuntos "coautores" del crimen.

Fuentes policiales señalaron que a  Nahuel nunca lo cuidó su mamá y que no se sabe quién es el padre, por lo que hace unos años estuvo alojado en el Hogar Miguel Máximo Gil, de Chacabuco. Luego, Angel fue adoptado por una familia que  desistió porque no podía "controlarlo" y finalmente se hizo cargo su tío, hermano de la madre.

"El no volvió con la mamá porque está en pareja con otro señor, ahora tiene dos hijos más, pero el papá de este nene no se quien es", dijo a la prensa Delia, tía abuela de la víctima. La mujer contó que el tío del niño "se iba a las siete de la mañana" y volvía a la noche porque trabajaba "en el campo". "A la mamá se lo sacaron por desnutrición, porque no lo atendía, y actualmente el chico estaba en la calle mendigando", concluyó Delia.