La joven, de 24 años, denunció que como consecuencia de esos abusos tuvo tres hijos. Junto a los menores y a dos hermanos, de 18 y 20, permanecen bajo el régimen de Protección de Testigos. “Los hermanos tenían miedo de las represalias que pudieran tomar los familiares del padre, por la denuncia que ella hizo”.
La mañana del miércoles una mujer de 24 años se presentó a la fiscalía departamental de Las Heras para denunciar que durante la mitad de su vida fue violada por su papá y que, como consecuencia de esos abusos, tuvo tres hijos. El caso fue derivado a la Fiscalía de Delitos Complejos de Mendoza, a cargo Santiago Garay, quien ordenó la detención del hombre. Le imputó el delito de “presunto abuso sexual agravado por el vínculo”. En los próximos días se realizarán los estudios de ADN para cotejar la identidad de los menores.
“Ella se presentó y contó cómo el papá la violó desde que tenía 12 años. Y que, producto de esas violaciones, tuvo tres hijos, que tienen 6, 4 y 2 años”, explicó a Infojus Noticias una fuente judicial. Tras la denuncia, el fiscal Garay ordenó un allanamiento en la casa donde vivía la joven con sus tres hijos, sus padres y dos hermanos menores, en el Barrio Covirpol, un conocido asentamiento de las afueras de la capital mendocina. El hombre, que tiene 46 años y trabaja como vigilador privado, fue aprehendido en una casa vecina.
En sede judicial se abstuvo de declarar y se le imputó el delito de “presunto abuso sexual agravado por el vínculo”, que prevé una pena de 4 a 10 años de prisión. “A la chica se le dijo que se quedara en la fiscalía hasta que se terminara el allanamiento. Y cuando terminó fue hasta ahí, acompañada por una autoridad del Programa de Testigos Protegidos, con sus tres hijos, sus cosas y también pidió que la dejaran llevar a sus dos hermanos, un varón y una mujer, de 18 y 20, con ella”, agregó la misma fuente.
Desde entonces la joven está en un domicilio del Ministerio de Seguridad mendocino con protección policial. “Los hermanos tenían miedo de las represalias que pudieran tomar los familiares del padre, por la denuncia que ella hizo”, explicó la fuente. La joven explicó que su padre “siempre la tuvo amenazada y que, aunque podía entrar y salir de su casa, en el último tiempo, se había empezado a ‘revelar’ y eso le trajo más problemas con él. Ella no trabajaba, ni estudiaba. La situación de la familia en general era muy humilde”, detalló. “El estado de ella es bueno, en general, pero los nenes eran atendidos por la Fundación CONIN por cuadros de desnutrición”, agregó.
Una visita de unos tíos, que en los últimos días llegaron desde el sur del país hasta la casa de la familia, fue determinante para que la joven se animara a dar su testimonio en la justicia. “Ellos la convencieron de que tenía que denunciarlo”, confirmó la fuente.
Cotejo de ADN
Entre medidas dispuestas por Garay está el cotejo de ADN para confirmar los datos de los tres menores. “A la joven y a sus tres hijos ya se les tomaron muestras de sangre, en los próximos días se le tomarán al detenido. Eso será determinante.”, agregó la fuente.
El fiscal también pidió pericias psicológicas al hombre, a la joven y a sus dos hermanos. Con ellos espera establecer si la madre de la joven y esposa del acusado estaba al tanto de los abusos. “Lo primordial era detener al hombre y dar protección a la joven y sus hijos. Y ahora es tiempo de determinar si la mujer sabía, lo ignoraba, o se hacía la desentendida”, explicó la misma fuente.