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Tres personas fueron detenidas acusadas de asesinar a tiros a un jugador de 17 años de la sexta división del club Los Andes y a un amigo de éste, en un aparente ajuste de cuentas ocurrido hace un mes en la localidad bonaerense de Ingeniero Budge, informaron fuentes policiales.

Las detenciones se concretaron durante las últimas horas y estuvieron a cargo de efectivos de la Dirección de Homicidios de la Superintendencia de Investigaciones del Ministerio de Seguridad bonaerense, quienes llevaron a cabo siete allanamientos en diversos domicilios de Ingeniero Budge, partido de Lomas de Zamora.

Según dijeron los voceros, se trata de un hombre de 30 años, sindicado como el autor material de los homicidios, y sus dos cómplices, de 26 y 31, todos acusados de pertenecer a una banda de delincuentes de la zona con la que aparentemente las víctimas, Lucas Alderete y Julio Vázquez (29), tenían una rivalidad.

"Aparentemente fue un problema entre bandas. Era un enemistad de vieja data entre integrantes de dos organizaciones delictivas", dijo uno de los investigadores del caso, pese a que en una primera instancia el doble crimen fue investigado en el marco de un intento de robo.

En los procedimientos fueron secuestradas dos armas de fuego que deberán ser peritadas para averiguar si alguna fue la utilizada en los asesinatos, autos, dos motocicletas y municiones de distintos calibre.

El homicidio de Alderete y Vázquez ocurrió el 12 de julio, alrededor de las 1.15, en una vivienda de la calle Eva Perón al 3400, esquina Bolivia, del barrio Olimpo de Ingeniero Budge, donde el jugador, su novia y un amigo estaban conversando.

De acuerdo a los informado por las fuentes, en esas circunstancias alguien llamó a la puerta, los jóvenes fueron a abrir y fueron atacados con al menos diez balazos por un grupo de desconocidos, que los introdujeron a los golpes hacia el interior de la casa, pese a los intentos por cerrarles el paso.

Alderete, que jugaba como defensor en el club Los Andes, en el sur del conurbano, recibió un balazo en la tetilla izquierda y en el pecho, mientras que la otra víctima, Julio Vázquez, que trabajaba en un bar y vivía en la parte trasera de la casa, fue baleado en el hombro y en el estómago.

La única que resultó ilesa fue la chica, que era novia del jugador, también de 17 años.

El hecho fue calificado como "confuso" por los investigadores, quienes en un comienzo no descartaron que se haya tratado de un intento de robo.

Sin embargo, durante la pesquisa cobró fuerza la hipótesis de que tanto víctimas como asesinos pertenecían a distintas bandas delictivas rivales de la zona y de que el ataque fue en realidad un ajuste de cuentas.