El saxofonista Naco Goldfinger está acusado de colaborar con una banda que robó una casa en un barrio cerrado de Benavidez, Partido de Tigre. Está a la espera de ser indagado por el fiscal de la causa.
La policía detuvo ayer a Ignacio Alfredo Pardo, de 49 años, por un robo en el mismo barrio cerrado de Benavídez donde vive. Está acusado de ser cómplice de una banda delictiva que asaltó a una familia hace dos semanas. “Estamos tras la pista de otro delincuente del robo”, dijo a Infojus Noticias el fiscal a cargo de la investigación, Jorge Fitipaldi.
Pardo fue uno de los miembros originarios de la banda de rock Los Fabulosos Cadillacs en la década del 80. Se lo conoce como Naco Goldfinger. Tocaba el saxo tenor en la banda y grabó los primeros cinco discos, entre los años 1986 y 1990, hasta que abandonó en 1991.
El 19 de febrero dos delincuentes armados redujeron y robaron pertenencias a una familia del country San Isidro Labrador, partido de Tigre. Después escaparon sin levantar sospechas en los empleados de seguridad.
La investigación del hecho estuvo a cargo del fiscal Fitipaldi de Benavídez. Después de entrevistar a víctimas, a la guardia del barrio y de analizar imágenes de las cámaras de seguridad, los investigadores siguieron la hipótesis de que los asaltantes habían actuado con el apoyo de alguno de los residentes del barrio.
Por los elementos obtenidos, el fiscal determinó que Pardo había sido partícipe necesario del robo y ordenó su detención. La policía de Benavidez llegó ayer a la casa del imputado, sobre la calle Italia 5043 y el acusado quedó detenido.
El dato de la detención del músico se filtró a la prensa en las últimas horas y desde la fiscalía temen que el responsable del robo que buscan se de a la fuga. El acusado fue trasladado a la comisaría local a la espera de ser indagado por el fiscal.
Según fuentes policiales, Pardo se dedica al comercio. En una entrevista en 2009, Naco dijo sobre su paso por los Cadillacs: “Lo divertido era que en las giras nos reíamos mucho. En el colectivo hacíamos programas de radio entre nosotros, Flavio hacía voces, Luciano hacía entrevistas, hablaban con voces bizarras, nos decostillábamos de la risa”.