Infojus Noticias

A María Fernanda Chicco, de 18 años, su familia la buscaba desde el domingo. El martes una vecina encontró su cuerpo cerca de un corralón de Ceres, al noroeste de la provincia de Santa Fe. Al lado del cadáver estaba la bicicleta playera verde de la chica. En un primer momento los investigadores apuntaron al ex novio de la chica. Sin embargo, la fiscal adjunta Silvina Verney de la Unidad Fiscal de San Cristóbal imputó a una adolescente de 16 años, actual pareja del joven, cuya identidad se mantiene en reserva. Mañana declarará su versión de lo que pasó. De acuerdo a fuentes cercanas a la causa consultadas por Infojus Noticias a la joven la ahorcaron con un alambre.

“Por envida y por celos la mató. La llevó hasta ahí engañada. Pensó que se iba a encontrar con su ex novio pero se encontró con ella”, dijo a Infojus Noticias Javier Chicco, el padre de María Fernanda. Ayer la familia despidió a la joven después de que le entregaran el cadáver, tras la autopsia.

Según un comunicado oficial del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe la causa probable de la muerte de María Fernanda fue asfixia por ahorcamiento con fractura de tráquea. La primera hipótesis que plantean los investigadores es que la adolescente imputada usó el celular de su novio y se hizo pasar por él para coordinar un encuentro con María Fernanda.

Cuando todavía estaba desaparecida, el padre fue hasta la casa de la principal acusada. “Ella negó haber visto a mi hija desde un principio. Lo hizo con una frialdad increíble”, contó. La joven de 16 años detenida fue identificada por la fiscal porque aparece en un video grabado por una cámara de seguridad de un negocio de la zona cercana al predio donde se encontró el cuerpo. Fuentes de la investigación aseguraron que en el registro pueden verse “los primeros momentos del ataque”. “No quise ver las imágenes, pero fueron fundamentales para encontrar a la culpable”, dijo Javier Chicco.

Por la edad de la supuesta autora del crimen el caso fue remitido al Juzgado de Menores de la ciudad de Rafaela, a cargo de Alejandra Feraudo de Platini. Mañana la joven declarará ante la magistrada.

María Fernanda estudiaba cine y televisión en Córdoba y había ido a su pueblo natal a pasar el feriado de carnaval. “Era muy familiera”, la describió su padre. La investigación por su desaparición comenzó cuando los padres de la joven hicieron la denuncia en la Comisaría Segunda de Ceres el lunes a las 2 de la madrugada. “Los progenitores de Chicco indicaron que su hija estaba ausente de su domicilio desde el domingo a las 12:50 aproximadamente, y que intentaban comunicarse al celular y no contestaba. A partir de ése momento, se informó del caso a la Fiscalía y se realizaron tareas de rastrillaje”, comunicó la fiscalía en el portal del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe.

El martes a las 8.25 una vecina llamó a la fiscalía para denunciar que en un depósito lindante a su domicilio y comercio, ubicado a la vera de la ruta nacional 34, había una persona sin vida. Cuando la policía fue hasta el lugar constataron que se trataba de la adolecente desaparecida desde el domingo.

En el predio donde fue encontrado el cadáver se hicieron distintas pericias que estuvieron a cargo de las autoridades policiales de la Unidad Regional XIII, de la Policía de Investigaciones y el médico y bioquímico policial de San Cristóbal.

La joven acusada del crimen primero fue detenida en la Comisaría Segunda de Ceres. Sin embargo ayer debió ser trasladada a Rafaela por decisión de la jueza de Menores. Fue cuando un grupo de vecinos fue hasta la sede policial para pedir que liberen a la chica para hacer “justicia por mano propia”. Ante la inevitable negativa de las autoridades judiciales y policiales, comenzaron a arrojar piedras al edificio de la comisaría. Lesionaron a tres agentes policiales y provocaron daños materiales. Por esta situación violenta se abrió una nueva causa penal.