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La dirección de Asistencia Jurídica Internacional de la Cancillería notificó a la justicia de Salta que remitirá a la embajada argentina en Italia el pedido de extradición del cura Alessandro De Rossi. El párroco está acusado de abuso sexual a un adolescente mientras estuvo en una parroquia de Salta, entre 2008 y 2013. Así lo confirmaron fuentes de la justicia salteña que señalaron que el pedido será “remitido a la brevedad”, y aclararon que en caso de no acceder a la extradición la justicia italiana el párroco podría ser juzgado por la justicia de aquel país.

Pablo Farah, juez de feria durante la segunda quincena en los tribunales salteños, fue quien recibió una nota de Horacio Basabe, a cargo de la Dirección de Asistencia Jurídica Internacional del Ministerio de Relaciones y Culto. Desde allí se informó que la solicitud remitida por la justicia provincial “observa los requisitos formales previstos en la Convención de Extradición de Italia (Ley 23708) y en consecuencia será remitida a la brevedad a nuestra Embajada en Italia”.

Un punto en el que se hace hincapié en la nota enviada desde Cancillería, según explicaron las fuentes judiciales, es que la nacionalidad del cura podría ser una de las causas para el rechazo de la extradición. Esto está previsto en el artículo 4 de la Convención de Extradición con Italia donde se establece que “se tendrá en cuenta la nacionalidad de la persona reclamada al momento de la decisión sobre el pedido de extradición”.

Por eso, “cada parte podrá rehusar la extradición del propio nacional”, aunque en caso de ser denegada por Italia De Rossi puede ser sometido a pedido de Argentina a un proceso penal en Italia. “La Parte requerida tendrá la obligación, a pedido de la Parte requirente, de someter el caso a las propias autoridades competentes para la eventual promoción de un proceso penal”, dice la convención.

Mientras estuvo en Salta, De Rossi cumplió funciones en la Vicaría "María Medianera de todas las gracias" del barrio Islas Malvinas de la ciudad salteña durante cinco años. En enero de 2014, poco después de que el sacerdote volviera a Italia, uno de los adolescentes que concurría a la parroquia lo denunció en la justicia por abuso.

La denuncia fue presentada el 9 de enero del año pasado y luego la justicia lo imputó por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por corrupción de menores en concurso real”. En el momento del abuso el chico era menor de edad y hoy tiene 19 años. Fuentes con acceso al expediente explicaron que el joven denunció los presuntos abusos del cura y que también sostuvo que habría otros casos como el de él. Aunque estos no salen a la luz porque “el sacerdote enviaría unos mil pesos por mes a las víctimas”, explico esta fuente. Y agregó:  “Les estaba comprando el silencio”.

Cuando De Rossi se fue de Salta, una de las teorías que se manejaron es que se habría ido porque fue amenazado y golpeado en un robo. Mientras que otros sostienen la posibilidad de que esa golpiza esté en el marco de la denuncia y que “tenga el condimento del abuso”, explicaron desde la justicia salteña.

El juez que lleva la causa es Diego Rodríguez Pipino -juez de Garantías de Cuarta Nominación- quien solicitó la captura internacional del cura a pedido del fiscal Pablo Paz. La medida se concretó el 31 de diciembre del año pasado, cuando De Rossi fue detenido en una parroquia romana, la San Luigi Gonzaga, en donde se encontraba. Actualmente está bajo arresto domiciliario en Italia.