La ex funcionaria menemista es juzgada por el Tribunal Oral Federal N°6 por una presunta estafa de 250 millones de pesos durante la privatización de la telefónica ENTEL, en la década del ‘90. Este es el cuarto juicio contra María Julia por su paso por el menemismo.
La fiscal Sabrina Namer alegó hoy en el jucio que afrenta la ingeniera María Julia Alsogaray por administración fraudulenta. Para la ex funcionaria pidió cuatro años de prisión, costas e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Para el ex coordinador de ENTEL, Gustavo Daneri, tres años de prisión en suspenso e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Namer calificó a ambos como coautores de la estafa. Para el representante de la consultora KPMG Hernán Pflaun pidió dos años de prisión y costas, por considerarlo partícipe necesario. La fiscal pidió la absolución del empresario Juan Carlos Pyekenhayn. La ex funcionaria menemista es juzgada por el Tribunal Oral Federal N°6 por una presunta estafa de 250 millones de pesos/dólares durante la privatización de la telefónica ENTEL en la década del ‘90.
Pasadas las 12, la fiscal repasó las tareas de cada uno de los imputados respecto a la ex ENTEL. "Daneri separó deliberadamente a la Sindicatura General de la Nación (Sigen). Si la Sigen hubiera controlado este pliego como controló a Obras Sanitarias, no hubiera pasado el control de legalidad", dijo Namer en la denominada Sala B de Comodoro Py.
A lo largo del juicio se expusieron los contratos de liquidación y certificación de obras públicas que firmó Alsogaray con la Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por el estudio Jaime Fernández Madero, Copiga S.A y la consultora KPMG.
La fiscal se preguntó si era posible que la UTE conociera de antemano el presupuesto y condiciones de la ex ENTEL. Ante los jueces Julio Panelo, María del Carmen Roqueta y José Martínez Sobrino, Namer respondió que no era factible. "La oferta de la UTE fue confeccionada con la complicidad de los funcionarios. Los integrantes de la UTE contaron con la complicidad. Resultó falsa la legalidad del concurso. Fue una licitación direccionada y tanto Daneri como María Julia no podían desconocerlo", determinó.
"Ese contrato le daba a la UTE la posibilidad de cobrar el 18 por ciento de ganancia por la nada misma. Esto fue gracias a quienes beneficiaron los intereses de particulares".
Namer le recordó al TOF que se iniciaron 25 demandas en perjuicio de más de cinco millones de pesos por los hechos sucedidos.
Durante la primera parte, escuchó el alegato José Ipohorski, letrado de la Oficina Anticorrupción. En el caso conocido como Coimas en el Senado, Ipohorski también fue querellante por la OA y Namer la fiscal.
En las cuatro horas de alegato -tiempo consensuado con el TOF- Namer les habló a los jueces. Casi sin pausa, su discurso tuvo preguntas y argumentaciones que fueron acompañadas por gestos enfáticos con las manos. Mientras Namer hablaba, María Julia le pasaba papeles con anotaciones de su puño y letra a su abogada defensora.
Al mismo tiempo, Daneri se ofuscaba en ciertos tramos del alegato, decía en voz baja: "Es mentira", cuando estaba en desacuerdo, como por ejemplo la función de empleados en la ex ENTEL. Sus abogados tomaron nota para decirlo la semana próxima, turno de los alegatos de la defensa. Aunque después del cuarto intermedio por momentos dormitaba y se despertaba cuando su abogado le hablaba. No fue el único en dormirse.
Según la acusación, Alsogaray duplicó los precios sin justificativos en los contratos y amplió los plazos de ejecución, movimientos que habrían perjudicado al Estado en 250 millones de pesos/dólares.
La semana pasada, María Julia, de 71 años, amplió su declaración indagatoria: “Soy ingeniera industrial, aunque en los últimos años he aprendido mucho de Derecho. Estábamos en un país donde conseguir teléfono tardaba 20 años", le dijo al TOF.
Este es el cuarto juicio contra María Julia por su paso en la administración menemista. En abril de 2013, la exfuncionaria fue condenada a cuatro años por corrupción en los contratos en la Secretaría de Recursos Naturales que ella encabezó. Un tiempo antes también fue condenada por enriquecimiento ilícito y obligada a devolver el dinero. En el juicio por la supuesta contratación irregular de una campaña publicitaria, fue sobreseída porque la causa prescribió.