La Cámara de Diputados convirtió esta madrugada en ley el paquete de proyectos del Poder Ejecutivo que incluye la actualización de la normativa de abastecimiento, la creación del fuero especializado y el observatorio de precios.
Se necesitaron catorce horas de debate para llegar a la votación. “No nos vamos a cansar de defender el mercado interno”, dijo la presidenta de bloque del Frente para la Victoria, Juliana Di Tullio, minutos antes de la aprobación del paquete de leyes para empoderar al consumidor frente a la concentración de poder en las empresas.
La reforma de la ley de Abastecimiento tuvo 130 votos a favor, 105 en contra y 5 abstenciones. El Observatorio del Consumidor tuvo 136 afirmativos y 104 negativos y la creación de un fuero específico generó gran consenso: se aprobó con 202 votos a favor y 36 en contra. Los cálculos que circulaban en los pasillos del Congreso apuntaban a que la sesión, si todos exponían el máximo de tiempo estipulado, podría durar 24 horas. Los presidentes de las comisiones negociaron que solo hablaría una cantidad de representantes –los que lo pidieran-. El resto daría su voto y cargaría a la base de datos sus oposiciones si las tuviera.
Los diputados se refirieron, desde los distintos espacios políticos, a los palcos poblados de jóvenes militantes. Identificados con insignias del conglomerado Unidos y Organizados, es la segunda vez en una semana que este público se convoca incluso de madrugada para escuchar el debate político en vivo. Los militantes y el público recibieron varios llamados de atención por sus silbidos o cantos políticos.
Elisa Carrió (UNEN) llegó en el momento de la votación y pidió la palabra a Julián Domínguez, que presidió la sesión. “Vamos a votar en contra pero quiero que me den la palabra”, dijo Carrió y Domínguez le explicó que los presidentes de comisiones ya habían acordado una forma de votación. Carrió dijo que ella se negaba a los acuerdos que se habían pactado y Domínguez le sugirió que “entonces participe de la Labor Parlamentaria”.
"Quedó demostrado que si la oposición fuera Gobierno, no utilizaría estas normas para defender y ampliar derechos de los consumidores. Yo creo que está muy bien que la oposición vote en contra, creo que cada uno tiene que estar en su lugar. Hay debates donde me duele que estén en contra; pero hoy no me duele lo que hacen, me gusta estar de este lado, porque tomaron la decisión política de ponerse del lado del más fuerte, del más poderoso, y así va a quedar registrado”, dijo Di Tullio.
La legisladora que siempre cierra las sesiones por ser la presidenta de bancada del bloque mayoritario dijo que se va pintando el panorama político: “Algunos ya no citan a Perón, otros hablan de la ‘mano invisible del mercado’ y no se sonrojan y no llama la atención que la izquierda esté con la Sociedad Rural Argentina”.
En contra: UNION PRO + UCR
“Las leyes que estamos tratando no son para defender al consumidor, porque para eso porque ya existe una ley de Consumidor y una ley de Defensa. Esta ley es para darle poder a algunos funcionarios del Ejecutivo, para ser ejercidas como poder político y con absoluta arbitrariedad” dijo Federico Pinedo, titular de la bancada UNION PRO.
Del mismo lado de la sala del Congreso, el presidente del bloque UCR, Mario Negri, dijo que el radicalismo votaría en contra de las tres leyes y sostuvo que “los únicos dos países que tienen leyes de este tipo son Venezuela y Ecuador”. Negri nombró al ex secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno y pidió que lo recuerden como la persona en la que se “resumió la defensa del consumidor y el equilibrio de mercados”. Después recordó los progamas “milanesas para todos” y “pescado para todos” y preguntó si "así se podía regular el mercado internacional", a lo que la oposición respondió con aplausos y risas.
Patricia Bullrich también recordó a Moreno, después de citar a Michel Foucault en un párrafo dedicado al control en los campos militares. Bullrich dijo que “esto no es una ley” y que “en realidad se intenta darle un sostén jurídico a una decisión política”. Después recordó al ex secretario de Comercio Interior: “Lo que Moreno hizo a fuerza de apriete y guante de box será ahora un observatorio. Será un Moreno institucionalizado”.
Sentada al lado de Sergio Massa –que no habló–, la diputada del Frente Renovador, Graciela Camaño reclamó comprensión del pasado y dijo que “la vida no es una foto sino una película”. También pidió que no se diga “que es una ley para defender al consumidor” y teorizó que “es una ley porque faltan dólares”.
Horas antes, Felipe Solá había dicho: "Es una burla que se cree un Observatorio de Precios cuando no hay un INDEC autárquico" y José De Mendiguren opinó que "el proyecto de Ley de Abastecimiento apunta a buscar culpables y no soluciones para los problemas de la economía argentina".
¿Cuál es el país que sueñan?
“Si quieren tener la mayoría abrumadora enamoren al pueblo con sus propuestas e ideas”, dijo Mauricio Gómez Bull del FpV. El diputado respondió a las críticas de la oposición: “Rechazan la regulación de cualquier medida que defienda a los trabajadores ¿Cuál es el país que sueña la oposición? ¿La del 25 por ciento de desocupación, del 50 por ciento de la pobreza, la del proceso político que termino yéndose en helicóptero con represión y muerte en las plazas?”.
"Lo que se discute son las sacrosantas ganancias privadas"
Carlos Heller, del Frente Nuevo Encuentro, dijo que “resulta difícil que las centrales de trabajadores suspendan empleados y por otro lado no entreguen autos porque no les gustan los planes impulsados por el gobierno” y planteó que “lo que está en discusión son las sacrosantas ganancias privadas”.
Desde la UCR, Jorge Cano criticó la sesión: “Si seguimos evocando sesiones históricas, vamos a tener que aumentar los días en el calendario para los que estuvimos votando estos días. Realmente ni para los que votaron a favor ni en contra estas leyes pueden considerarse históricas. Forman parte de un agenda del oficialismo que no tiene que ver con lo que le pasa a la gente”.
“Si nos proponen ampliar la economía para bajar la inflación, nosotros decimos ‘no gracias’. Si quieren volver a importar para bajar la inflación, yo les quiero decir que van a reventar a la economía nacional”, cerró Di Tullio.