"Dos de cada tres mujeres víctimas de la violencia de género reconocieron que las situaciones de violencia empezaron en el noviazgo", contó Karina Cousture, titular del Programa Noviazgos violentos de la Dirección de la Mujer porteña. Por eso, desde distintas áreas del Estado, se trabaja en distintas actividades en escuelas, clubes y otros espacios para promover la igualdad de género y erradicar la violencia.
“A las mujeres hay que tenerlas con mano dura”, decía el cartelito. Uno de los 30 varones de 17 y 18 años del Club Atlético Acassuso que estaba participando del taller, lo agarró y lo puso en la columna de “verdadero”. Los chicos estaban haciendo una actividad sobre mitos en las relaciones de pareja. Cuando terminó la capacitación se dio cuenta que había estado equivocado: a las chicas no había que tenerlas con mano dura. También aprendió que pedirle el celular a su novia para ver los mensajes tenía un nombre: maltrato. “Ellos no lo reconocen como violencia, creen que es normal. Cuando hablamos de estos temas se dan cuenta que a ellos mismos tampoco les gusta perder la intimidad o sentirse controlados cuando sus novias les revisan el teléfono” explicó a Infojus Noticias, Mariela Bañares responsable del área de capacitación a la comunidad del Programa Las víctimas Contra Las Violencias del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
Bañares estuvo a cargo de este taller que se dio en diciembre a pedido de la Asociación de Amigos del Alma y la Asociación de Futbol Argentino (AFA). En todo el país, distintos organismos nacionales, provinciales y locales trabajan con la educación como eje para la prevención de la violencia contra las mujeres y la erradicación de estereotipos de géneros. A contrapelo de estas iniciativas transformadoras, el peine arrastra la cifra que preocupa: 277 mujeres asesinadas por violencia machista el año pasado.
Los celos, el control, la obsesión y las amenazas son los primeros síntomas en las relaciones violentas, posesivas o dañinas que pueden terminar con una muerte. Los recientes crímenes de Chiara Paéz en Rufino y Katherine Moscoso en Monte Hermoso, ubicaron en la agenda pública la preocupación por los femicidios entre la población adolescente. Pero también pusieron sobre la mesa que la clave está en el período del noviazgo.
“Cuando yo atendía sólo adultas, dos de cada tres reconocieron que las situaciones de violencia comenzaron en el noviazgo. En ese momento no la reconocían como tal o pensaban que iban a cambiar”, explicó la psicóloga Karina Cousture, titular del programa Noviazgos Violentos de la Dirección de la Mujer porteña.
El tema en las aulas
En 2006, la sanción de la ley 26.150 puso en marcha el Programa Nacional de Educación Sexual Integral (ESI) en el ámbito del Ministerio de Educación de la Nación. La ley es contundente: exige que en todos los establecimientos desde el preescolar hasta el secundario se den contenidos que promuevan el cuidado de la salud, eviten el abuso sexual, ayuden a erradicar la violencia de géneros y a promover la igualdad entre varones y mujeres. La obligación de educación sexual integral es transversal a todas las materias y no distingue entre público y privado. Para que se garantice este derecho que tienen todos los niños, niñas y adolescentes el Programa Nacional, que dirige Mirta Marina, lleva adelante un plan de capacitación para los docentes y editó cuadernillos con actividades puntuales para que los educadores las trabajen en las secundarias. Sin embargo, la ESI no llegó a todas las aulas del país. El compromiso no es igual en todos los niveles de gobierno. “Capacitamos en todo el país. Hay algunas provincias en las que tenemos mayores dificultades para llegar, como San Luis y San Juan”, explicó Marina a Infojus Noticias.
El territorio porteño es el que mayor resistencia presenta frente a la Educación Sexual Integral en las escuelas. “Es incomprensible que la Ciudad de Buenos Aires no desarrolle la educación sexual y reproductiva cuando fue pionera en el tema y hasta tuvo su propia ley -la 2110-. Hubo mucha desinversión de equipos de producción y de materiales”, explicó la máxima autoridad del Programa Nacional de Educación Sexual Integral.
Según una nota de la periodista especializada Luciana Peker en Página 12, el año pasado la gestión de Mauricio Macri asignó un 0,001 por ciento de su presupuesto a cumplir con la Educación Sexual Integral. Dentro de la partida del Ministerio de Educación, los fondos destinados a ESI representaron sólo el 0,006 por ciento, de acuerdo con un informe del espacio La Fábrica Porteña que revela el trabajo de la periodista.
Experiencias locales
Al oeste del conurbano bonaerense, en el municipio de Morón, la dirección de Políticas de Género da talleres sobre noviazgos violentos en escuelas primarias, secundarias y otros espacios. “Trabajamos para que transiten sus relaciones de manera libre y saludable”, explicó a Infojus Noticias Marisa Ramos, directora del área. Cuando los chicos llegan a la capacitación tienen que completar una encuesta. “¿Quiere saber a toda hora con quién hablás, dónde y con quién estás”, les preguntan.Los adolescentes se llevan sus respuestas para evaluar sus relaciones personales después de pasar por la actividad. “La prevención es fundamental para alertar sobre situaciones graves”, dijo.
En Morón existe un Plan de Igualdad de Oportunidades entre varones y mujeres (PIO). Desde ese enfoque se trabaja en la sensibilización, promoción, prevención pero también en la asistencia. El Centro Municipal Vivir sin violencia atiende mujeres a partir de los 14 años. Por año pasan 1.500 víctimas por ese espacio local.
¿Dónde conocer más sobre talleres de prevención?
-Para solicitar talleres de sensibilización sobre violencia sexual y familiar al área de capacitación a la comunidad del Programa Las víctimas Contra Las Violencias del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación vicontravio@jus.gov.ar
-Programa Noviazgos Violentos que depende del Ministerio de Desarrollo Social porteño, que trabaja con adolescentes entre 13 y 21 años con vínculos de maltratos físicos, psíquicos y/o sexuales en sus relaciones de pareja. También acompaña a sus padres y familiares. Los profesionales del programa atienden todos los días, las 24 horas, en la línea gratuita y anónima 0-800-666-8537.
-En Morón, la Dirección de Políticas de Género está ubicada en Pellegrini 622, 1º piso. En todo el Departamento judicial funciona la línea gratuita 0800 345 6853 para la atención de las víctimas.
MFA/LC