Infojus Noticias

La investigación por la muerte de Gonzalo Crespo tendrá novedades en los próximos días, cuando el juez Diego Javier Slupski tome indagatoria al cabo Javier Almirón por su presunta autoría del hecho. El joven de 24 años fue asesinado en el barrio de Saavedra el viernes pasado. La fiscal Cristina Caamaño está esperando que el policía, quien se encuentra detenido en un hospital con una herida de bala, pueda recuperarse para declarar en el despacho del juez. “Creemos que el viernes podría tener el alta, sino, todo se postergará hasta la semana próxima. Mi hipótesis es que hubo, al menos, un exceso en la legítima defensa. Hasta ahora, la investigación señaló que disparó en siete ocasiones, a menos de diez centímetros de Crespo, y de esos siete impactó en cinco, tres mortales en sul cuello y dos en el tórax. Entendemos que si fue a menos de diez centímetros, y de acuerdo a su versión de que se defendió después de un supuesto robo, entonces tendría que haberlo detenido. Como eso no sucedió, Almirón quedó imputado por homicidio calificado”, dijo Caamaño a Infojus Noticias.

En este sentido, la fiscal enfatizó que “no hay ninguna causa contra Crespo, nadie lo vio robando, no hay testigos ni pruebas de ningún tipo”. Es decir: descartó la versión oficial de los voceros policiales, quienes habían dicho que Almirón disparó “en dos ocasiones”, en “medio de un forcejeo” por un probable enfrentamiento. Según Caamaño, habría dos posibilidades de por qué Almirón quedó con una herida de bala en la rodilla. “Una es que Crespo le haya tirado desde el piso, porque las pericias demostraron que Almirón le disparó de frente. En ese punto, se desterró la hipótesis que Crespo estaría fugándose por un supuesto robo. Y la otra es que la herida de bala de Almirón se haya producido por el rebote de uno de sus propios disparos. En ambos casos, el policía está complicado en su procesamiento judicial”.

Respecto a los hechos ocurridos después de la muerte de Crespo, la instrucción está recogiendo evidencia de las cámaras fílmicas de la zona. “Estamos en pleno proceso de búsqueda de todas la filmaciones de la cámaras caseras y televisivas. Mi hipótesis es que hubo un incumplimiento de la Policía Federal y de la Metropolitana, que no impidieron a tiempo los hechos violentos. Ellos se excusaron diciendo que si actuaban habría sido una masacre, pero lo cierto es que no hicieron nada”, agregó la fiscal.

¿Un caso de “gatillo fácil”?

Por otra parte la abogada de la familia de Gonzalo Crespo,  Débora Hambo, aseguró que solicitará a la Justicia que investigue a la cúpula de la comisaría 49 al considerar que se trató de un caso de "gatillo fácil".

La abogada  explicó a Télam que en el momento del hecho Gonzalo no estaba armado y que el arma secuestrada "fue plantada por la policía". Según explicó, de acuerdo a testigos del barrio, las heridas que presenta el policía detenido por el episodio "fueron provocadas por un balazo disparado por él mismo, que rebotó en un adoquín de la calle".

El hecho ocurrió el sábado pasado a las 0.50 en la esquina de calle Estomba y Correa, en proximidades del barrio Mitre -en Saavedra-. Por el crimen permanece internado, en calidad de detenido, el cabo Javier Almirón, numerario de la comisaría 49.

Hambo confirmó que mañana se presentará ante la fiscalía del Distrito Saavedra-Núñez, a cargo de Cristina Caamaño, para poder acceder al expediente en calidad de particulares damnificados, e inmediatamente solicitará medidas para que se investigue "a toda la cúpula de la comisaría 49".

"Para nosotros es un nuevo caso de gatillo fácil policial. Creemos que no existió ningún caso de robo en la zona, creemos que el arma que secuestraron, y que la Policía dijo que pertenecía a Gonzalo, fue plantada, y creemos que las heridas que presenta el efectivo fueron provocadas por sus propios disparos", dijo la abogada.

Hambo relató que Gonzalo "no iba armado y no era un delincuente, tal como lo quiere hacer pasar la Policía. "Hacía tres o cuatro días que estaba en el barrio. Eran nuevos porque se habían construido una habitación en la casa de familiares. Esa noche, cuando Gonzalo escuchó a la Policía, se detuvo y levantó sus manos. Ahí mismo recibió un primer disparo en la pierna. Después recibió otros dos en el cuello y otro en la espalda", dijo la abogada.

El joven murió cuando era asistido en el Hospital Pirovano, el mismo centro asistencial al que había sido trasladado el policía Almirón. La versión policial señaló que la Policía estaba intentando identificar a los sospechosos de un robo y, en medio de un forcejeo con Almirón, se produjeron disparos en los que Gonzalo terminó muerto. Tras el crimen, vecinos del barrio Mitre se enfrentaron con la policía. Varios autos fueron prendidos fuego y otros fueron destruidos.

"Vamos a pedir la imputación directa del policía y pedir que se investigue a toda la cúpula de la comisaría 49. Sabemos quién fue el autor material, pero aún no sabemos quién es el responsable directo de que se haya producido tal ataque", dijo la letrada. u

Por decisión del juez de instrucción número 43, Diego Javier Slupski, Almirón está preso con consigna policial en el hospital, imputado del delito de "homicidio" y será indagado en las próximas horas. El cuerpo de Crespo fue inhumado ayer en el cementerio de Chacarita tras un breve cortejo que se trasladó por las inmediaciones del barrio Mitre, de Saavedra. La Justicia aún aguarda los resultados de los peritajes balísticos realizados sobre la pistola reglamentaria del policía y la Glock .40 que, según la policía, pertenecía al fallecido. Tras la indagatoria, el juez definirá si el suboficial actuó en legítima defensa o si hubo algún tipo de exceso.