El secretario de Justicia de la Nación, Julián Álvarez, destacó el inicio del nuevo fuero del Consumidor. Dijo que “cambia la ecuación” entre los consumidores y las empresas. Para reclamar sólo es necesario dar los datos personales y de la empresa a la que se denuncia. Luego el caso pasa a alguno de los 250 mediadores de la ciudad de Buenos Aires.
El secretario de Justicia de la Nación, Julián Álvarez, subrayó hoy que el nuevo fuero del Consumidor “cambia la ecuación” entre los consumidores y las empresas. “El consumidor era rehén y ahora es al revés: el que está en deuda es el empresario que debe cumplir”, afirmó Álvarez al detallar las ventajas que el nuevo sistema ofrece a los usuarios, que son el eslabón más débil en la relación de consumo.
“En el nuevo sistema entran todos los reclamos de los consumidores y se puede hacer el reclamo desde el momento en que se toma conocimiento (del daño)”, indicó Álvarez en declaraciones a la Televisión Pública, donde detalló que el reclamo puede comenzar mediante una denuncia al 0800 de la Secretaría de Comercio (0800-666-1518), en la página web www.consumoprotegido.gob.ar o en un Centro de Acceso a la Justicia.
El funcionario explicó que sólo es necesario dar los datos personales y de la empresa a la que se denuncia. Luego el caso pasa a alguno de los 250 mediadores de la ciudad de Buenos Aires, que toman el tema y en un plazo de siete a diez días se organiza la primera audiencia de mediación. “Las empresas están obligadas a ir. Si el empresario no va se le aplica multa”, indicó Álvarez y destacó que “el sistema de mediación permite solucionar el 80 por ciento de los casos y como máximo demora seis meses”.
“Se debe presentar la factura, foto o un testigo (del trabajo mal hecho o el producto dañado). Y la Secretaria de Comercio va a lleva un registro y si hay daño sistemático puede sancionar a la empresa”, agregó.
Álvarez ejemplificó: “Si usted compró 50 baldosas y no tiene la característica que quería o la colocación está mal hecha, puede reclamar daño directo, que significa ‘ponganme las baldosas que quiero y cómo quiero’; o si ocasionó daño moral o lucro cesante: si trabajaba ahí no pudo trabajar por dos meses también puede reclamar una indemnización. La firma del mediador es como una sentencia”.
Además, indicó que el sistema comenzó a aplicarse hoy en la ciudad de Buenos Aires porque ya existe un sistema de mediación pero se puede denunciar a cualquier empresa con domicilio allí. Eso es independiente del lugar geográfico dónde ocurrió el hecho de denunciado. Pero aclaró que ya se están llevando adelante las capacitaciones de mediadores en las provincias.
Este sistema incluye, también, a las empresas de telefonía celular. “En el servicio de los celulares tiene responsabilidad el Estado que no pone la antena y la empresa que no brinda el servicio. Si se puede acreditar que eso (el corte constante de las comunicaciones telefónicas) genera un daño sí, por supuesto”, agregó.
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