Infojus Noticias

El directorio de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) aprobó ayer por unanimidad el plan de adecuación del Grupo Clarín, lo que lo deja mucho más cerca de acatar plenamente la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Lo primero que deberán hacer Clarín y los otros grupos a los que se les aprobó el plan ayer, es presentar la nómina de autoridades. Es decir, los futuros titulares de las licencias o unidades de negocio en que se van a dividir. Para hacerlo, tienen 30 días contados desde ayer, y luego la AFSCA evaluará la lista. Infojus Noticias habló con Daniel Larrache, director de Gestión, Administración y Desarrollo del organismo, para profundizar los pasos que siguen a la adecuación.

“En principio, tenemos que ver que las autoridades propuestas cumplan con los requisitos de los artículos 24 y 25 de la ley: que no sean prestadores de servicio público, que no sean personas extranjeras con países con los que no tenemos convenios de reciprocidad, que no hayan sido funcionarios de la dictadura, etcétera”, explicó Larrache. Luego, el AFSCA evaluará las incompatibilidades que pueda haber en cuanto a la multiplicidad de licencias, si es que las autoridades propuestas tienen otras licencias, y por último se analiza la situación patrimonial del nuevo titular. Es decir: que no sea un testaferro.

“Si nos dicen que cierta unidad se la transfieren a José Pérez, y resulta que es un monotributista que nunca pagó Ganancias, podrá estar todo lo demás muy bien pero parecerá ser que se trata de un testaferro”, explicó el especialista.

Una vez aprobadas las autoridades propuestas, los grupos darán el paso tan comentado hasta el momento: la desinversión. Todo este proceso deberá durar 180 días. Corridos, según se lee en la resolución 2205 de la AFSCA, y no hábiles como sugirió Clarín ayer. La norma concede una prórroga de 30 días más, sólo si se demuestra que no se pudo cumplir por motivos externos. El plazo es amplio, para una transacción que igualmente lleva su tiempo. “A veces no se entiende la complejidad. Imagínate que si vender un auto es un trámite largo, más lo es vender una compañía tan grande. Tenés que ir al banco, a la IGJ, reestructurar la deuda, etcetera”, apunta Larrache.

En algún momento, se dijo que la Ley de Medios tendría un problema de aplicación porque ninguna persona estaría en condiciones de comprar lo que Clarín estuviera obligado a vender. “Eso es absolutamente falso. Si vos tenés un socio y te tenés que dividir, va de suyo que cada uno puede hacerse dueño de la parte que ya es suya. Es parte de las propuestas que hace Clarín, porque Fintech quedaría siendo socio de una de las compañías”, explica el especialista.

El presidente de la AFSCA, Martín Sabbatella, señaló que será fundamental para completar la adecuación que las empresas de cable se adecúen a la grilla establecida por el organismo. Para Larrache, es ahí donde los usuarios van a percibir los primeros cambios: “Con el tiempo, los dueños de las nuevas unidades mediáticas podrán también cambiar la línea editorial”.

Sobre la grilla, también se dijo que hay algunas diferencias en el trato hacia empresas que no son de Clarín, como DirecTV.  “La ley establece distintas condiciones de cumplimiento, ya sea para las licencias de cable físico o la de satelital, como es DirecTV.  Al cable físico (como Cablevisión) se le pide que complete toda la programación regional, mientras que a DirecTV se le exige que cumpla con la grilla nacional para satélite. Es distinta la grilla porque es distinta la ley”, explica Larrache.

Y da un ejemplo: el cable físico está obligado a subir en su grilla el canal abierto de la localidad en que opera. El satélite es nacional, por eso sólo está obligado a subir el canal de la localidad donde tiene su “up-link”, que en el caso de DirecTV es Martínez, provincia de Buenos Aires. “Los canales del área metropolitana son los obligatorios para DirecTV, y ellos lo cumplen”, apuntó. Clarín debe aún incorporar a su grilla canales regionales, como es el caso de CBA24N, en Córdoba.

Cuando se discutió la aplicación de la ley, algunos medios generaron dudas en torno a la continuidad de los puestos de trabajo, cuestión que ahora quedará resuelta con la transferencia de las licencias. Larrache es terminante respecto a este tema: “Es una condición legal en el marco del proceso de adecuación, tanto para el licenciatario que tiene que adecuarse como del que se va a hacer cargo. Tienen la obligación de garantizar los puestos de trabajo en las condiciones preexistentes”. Existe un convenio firmado entre la AFSCA y el Ministerio de Trabajo de la Nación junto con los sindicatos para garantizar los puestos.

Grupo Uno y los que faltan

En la asamblea de ayer, el directorio de la AFSCA aprobó otros cinco planes de adecuación además del de Clarín. Uno es el de Grupo Uno (Vila y Manzano). El caso es similar al de Clarín pero en menor escala: proponen la conformación de varias unidades de negocio. “En el caso de Supercanal, algunos cedentes ya los propusieron, mientras que otros medios directamente los venden”, explica Larrache.

Los principales medios del Grupo Uno son al momento América, América 24, Radio Puerto de Rosario, Difusora Entrerriana, Radio La Red, entre otros. Supercanal es el nombre de fantasía del sistema de cable que tienen en el interior. En el caso de Supercanal, la empresa está concursada y no podrán ejecutar inmediatamente su plan sino hasta que puedan hacer uso de la opción de compra. “Hay una aprobación sujeta a ese momento, en que recuperan el poder de la compañía”, dice Larrache.

Los otros planes que se aprobaron ayer son los de Aldrey Iglesias, un licenciatario de Mar del Plata que tenía participación en dos radios AM y deberá desprenderse de una; un cable operador de San Juan, otro de Mendoza y otro de Santa Fe. En la próxima reunión de directorio, deberán tratarse los cinco planes que faltan, entre los que se encuentran los de Telecentro, Grupo Prisa, Telefé, Olarte del interior y Radio Intercable, que es una compañía satelital que tiene incompatibilidad con la posesión de cable físico.

La división de Clarín

La propuesta aprobada para Clarín creará seis unidades de negocios independientes. LA primera conservará los canales más importantes que tiene la empresa, como Canal Trece de Buenos Aires, TN (Todo Noticias), además de Radio Mitre, Arte Radiotelevisivo Argentino (ARTEAR) y 24 licencias de cable, entre otras. La Unidad 2 reunirá la mayor parte de Cablevisión y Fibertel, otras 24 licencias de cable y la señal Metro. Las otras cuatro unidades se repartirán Canal Trece Satelital, Magazine, Volver, TyC Sports, Canal Rural, entre otras licencias de radio y televisión.

“Desde el punto de vista de la estrategia corporativa del Grupo, evidentemente eligieron especializarse”, opinó el especialista Martín Becerra, en diálogo con Infojus Noticias. “Es un cambio radical en un Grupo que tenía una lógica de funcionamiento conglomeral, que reúne numerosísimas actividades y casi todas ellas las lidera. Además, es un cambio muy grande porque si, como se especula, el Grupo Clarín se queda gestionando la Unidad 1 y no la 2, eso también va a mermar de manera muy grande los ingresos y la facturación que el Grupo tiene”, dijo Becerra, profesor de la Universidad Nacional de Quilmes e investigador del CONICET.

“Esas dos son las unidades más interesantes, que tienen mayor cantidad de actividades de las que hoy conforman el corazón del Grupo”, explica. “Para mí es un cambio muy trascendente porque aún recociendo que la estructura de propiedad va a continuar en manos de accionistas o gerentes probablemente actuales del grupo, no hay en la historia de la región un antecedente en el que un grupo tan concentrado deba dividirse y separarse debido a un cambio regulatorio como es la Ley se Servicios de Comunicación Audiovisual”.

Para el especialista, el tema de la modificación es la grilla es un tema importante, aunque espera que también se adecúen a ella otros grupos además de Clarín. Sobre los efectos que puedan verse en la televisión a partir de la división de Clarín, es prudente: “Hay una suerte de tópico que platea que una estructura de propiedad menos concentrada va a provocar también una diversificación de los contenidos. Esa suposición va a ser sometida a prueba ahora cuando no sólo Clarín sino también otros grupos terminen adecuándose al a ley. Vamos a tener la oportunidad de ver cómo se desarrolla”, reflexiona.