Hace trece años, Daniel Guggini vio morir a Riva sobre el asfalto, a 50 metros de las avenidas de Mayo y 9 de Julio. Hoy recordará ese momento ante el Tribunal Oral Federal 6.
Pasaron casi trece años desde que Daniel Guggini vio morir a un hombre sobre el asfalto, en medio de la represión que el 20 de diciembre de 2001 ordenó el gobierno de Fernando de la Rúa. Entonces, no supo cómo se llamaba ese joven, solo que unos metros atrás lo había invitado a subir en la moto que manejaba para alejarlo de los ataques policiales. Hoy, Daniel recordará ese momento ante el Tribunal Oral Federal 6, en el juicio por las muertes y los cientos de heridos que dejó el operativo de la Policía Federal en el centro porteño.
Gastón Riva se llamaba el joven que perdió la vida esa tarde, a unos cincuenta metros del cruce entre las avenidas de Mayo y 9 de Julio. Tenía 30 años y con María Arenas tenía tres hijos de ocho, tres y dos años. Esa mañana salió de su casa para ir a la mensajería en la que trabaja; pero cuando le tocó un viaje al centro se indignó con la violencia de la represión. Se sumó a los manifestantes, y con la moto intentó llegar a la plaza de Mayo. Poco después de las cuatro, María lo vio por televisión: estaba tirado boca arriba, rodeado de gente que intentaba ayudarlo. Lo cargaron en una ambulancia, pero no sobrevivió.
En este juicio, están señalados como responsables de manera indirecta (culposo) por el homicidio de Gastón y otros cuatro manifestantes el ex jefe de la policía federal Rubén Santos y sus subordinados, los ex comisarios Raúl Andreotti, entonces superintendente de Seguridad Metropolitana y el ex director general de Operaciones Norberto Gaudiero, responsables del operativo y el entonces secretario de Seguridad del Ministerio del Interior, Enrique Mathov. Los cuatros fueron señalados por incumplir con su deber como funcionarios públicos y por abuso de autoridad al haber ordenado la represión.
El pasado miércoles los jueces José Martínez Sobrino, Javier Anzoategui y Rodrigo Giménez Uriburu escucharon a un grupo de policías, entre ellos al armero de la comisaría 4ta. Oscar Alberto Ibarra, que el día 21 cuando se presentó en su puesto de trabajo encontró “un faltante de armas”. "No estaban las armas largas y el candado del armario donde se guardaban las municiones estaba roto". El policía que además se formó en el Ejército sobre el uso y la manipulación de armas, identificó entre los tiradores en el cruce entre las avenidas de Mayo y 9 de Julio, al ex principal de la seccional 4°, Víctor Belloni.
Belloni está filmado en el momento que empuña su escopeta contra los manifestantes, llegó a este juicio acusado por los intentos de homicidio de Marcelo Dorado y el motoquero Sergio Sánchez, sobrevivientes de esa trágica jornada. E Ibarra afirmó que las balas que disparó eran de plomo. El armero explicó que la escopeta que usó no funcionaba con balas de goma. “El mecanismo hace que se trabe con los proyectiles antitumulto, porque no tiene suficiente fuerza para completar el circuito después del primer disparo, ni para descartar el cartucho. Y para disparar otra vez hay que volver a cargar manualmente".