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La Justicia investiga las responsabilidades por el choque de un camión con un micro en la ruta 7 de Mendoza, en el que murieron 17 personas. Ya declararon otros choferes y algunos testigos. Se esperan los resultados del ADN, que permitirán identificar a la persona que iba en la cabina y a las restantes víctimas fatales. Aunque no se descarta ninguna hipótesis, los investigadores creen que el conductor del camión estaba borracho y por eso manejaba a contramano. El Ministerio de Seguridad de la Provincia sancionó a nueve efectivos.

El choque ocurrió el viernes a la altura del kilómetro 1.010 de la ruta que uno las provincias de Córdoba y Mendoza, cuando el camión embistió a un micro de pasajeros causando la muerte de 17 personas y dejando otras 14 heridas. Se cree que el caminero venía a gran velocidad y a contramano desde hacía algunas horas. Había salido de Ugarteche, Luján de Cuyo, y llevaba un cargamento de ajos con destino a Brasil. Debía detenerse en la aduana de la localidad de Palmira para precintar el cargamento y poder cruzar la frontera, pero se desvió antes de llegar allí.

Por el momento, los investigadores se inclinan por la versión de que el conductor estaba borracho, aunque no descartan ninguna posibilidad. “Todas las hipótesis están abiertas, pero la del asalto no es la que tiene mayor asidero”, dijo a Infojus Noticias el Director General de la Policía de Mendoza, Juan Carlos Caleri. Desde la empresa camionera habían deslizado la posibilidad de que el camionero hubiera sido asaltado y obligado a salirse del camino previsto. Sus compañeros lo vieron desviarse antes de llegar al peaje. Ya declararon en la Unidad Fiscal N° 2 de San Martín, a cargo de Martín Scattareggi. Se trata de tres conductores que iban en otros camiones de carga. También declararon testigos del hecho.

Se cree que el chofer estaba borracho por la denuncia de un conductor particular, que dijo haberse peleado con él dos horas y media antes de producirse el accidente. Según la versión de esta persona, el camionero lo había chocado algunos kilómetros atrás, y se había bajado de la cabina, borracho, para golpearlo. El mismo automovilista dijo que en ese momento quiso hacer la denuncia en una comisaría 25 de San José, Guaymallén, pero que no se la tomaron por “cuestiones burocráticas”.

“Eso fue dos horas y media antes del accidente. Cuando se produce el accidente, en la cabina iba una sola persona, lo que da la pauta de que era su verdadero conductor”, dijo Caleri. “Hay que esperar el análisis de ADN para saberlo”, agregó, debido a que los cuerpos están calcinados y no se puede saber a simple vista la identidad de esa persona.

Por la inacción de la comisaría 25, y por otras tres denuncias telefónicas que fueron desoídas, el Ministerio de Seguridad de la provincia pasó a disponibilidad a un subcomisario y un oficial de esa dependencia, junto con otros tres oficiales de la comisaría 25. Además, pasó a pasiva a un oficial inspector de la Policía Vial Norte y a tres oficiales del Centro Estratégico Operativo (CEO), que cobrarán sólo la mitad de su sueldo.

Las víctimas

Por el momento, muchas de las víctimas fatales continúan sin ser identificadas. Es que los cuerpos están calcinados y no puede saberse a simple vista la identidad. La empresa del micro de transporte aportó una nómina de 28 pasajeros que fue cotejada con el registro de heridos, pero aún no puede saberse si las personas que faltan murieron en el accidente o se habían bajado en las paradas previas. Al mismo tiempo, algunos pasajeros se habían subido en paradas intermedias y sus nombres no figuran en el listado de la empresa.

De los catorce heridos queda uno sólo en estado de gravedad. Se llama Stefan Herz, y está en terapia intensiva del Hospital Central. Según informó un comunicado emitido por el Ministerio de Salud del Gobierno de Mendoza, los trece heridos restantes evolucionan favorablemente y podrían ser dados de alta durante las próximas horas. Se trata de las siguientes personas:

-Procedentes de Córdoba: Andrea del Píccolo, una mujer embarazada internada en el Hospital Central; una persona con pasaporte aparentemente extranjera, mayor de edad, internada en el Hospital Lagomaggiore, cuyo nombre no fue dado a conocer.

-Procedentes de San Luis: Risma Federico, internado en el hospital Lagomaggiore; Rocío Gatica; Fabricio Camargo; Gladys Colque;  Edgardo Silva; Ana Ianardi; Ernesto Favari; Franco y Alma Camargo (ambos menores de edad), todos internados en el hospital Perrupato, de San Martín.

-Procedentes del departamento de La Paz, Mendoza: Virginia Sosa; Laura Ochoa, ambas internadas en el hospital Lagomaggiore; y Pablo Ríos, internado en el hospital Perrupato.