El próximo lunes, la jueza de Garantías de San Martín dejará libre al único acusado que queda detenido: se trata T., el mejor de 16 años, según adelantó su defensor. "La única certidumbre es el fallecimiento de Melina", dijeron los jueces de la Cámara.
A partir del próximo lunes, la causa por el crimen de la adolescente Melina Romero quedará sin detenidos. Ese día, a las 10, empezará la audiencia fijada por la jueza de Garantías de menores de San Martín, María Eugenia Arbeletche, para resolver la situación de T., el menor de 16 años que quedó como único detenido tras la liberación de los tres acusados. “Ese día él va a quedar en libertad. Lo que no se sabe todavía es si la jueza va por el sobreseimiento o bajo qué tipo de carátula lo va aliberar”, dijo el abogado de T, Jorge Novarese en declaraciones radiales.
La semana pasada la Sala I de la Cámara del Crimen de San Martín había revocado la prisión preventiva del pai umbanda César Sánchez, Joel “Chavito” Fernández (18) y Elías “El Narigón” Fernández, los tres mayores de edad detenidos por el caso. La decisión de la Cámara se conoció el 22, un día antes de que se cumplieran tres meses del día que encontraron el cuerpo de la menor de 17 años, a la vera del arroyo José León Suárez. En la resolución, los magistrados sostuvieron que, en la causa, “la única certidumbre es el fallecimiento de quien en vida fuera Melina Romero”. Novarese explicó que, en ese escrito, “la Cámara estaba resolviendo la situación de los mayores únicamente” y que, ahí mismo ordenó, “a la jueza que resuelva la situación de T”. Arbeletche consideró que la mejor forma de resolverlo era mediante una audiencia prevista para el lunes próximo.
Melina salió de su casa la noche del 23 de agosto a festejar sus 17 años en el boliche ‘Chankanab’ de San Martín. Las cámaras de seguridad registraron que llegó a las 23.24 y salió a las 6.46 del domingo. La policía bonaerense la buscó durante un mes en distintos rastrillajes, sin embargo su cuerpo lo encontraron dos mujeres en una bolsa de residuos y envuelto en una frazada. Estaba a la vera del arroyo José León Suárez, un desprendimiento del Río Reconquista. La autopsia no pudo determinar cómo murió la chica, ni si fue abusada sexualmente.
Novarese explicó que T. y Melina “se habían conocido unos días antes, pero que ese día -en referencia al que desapareció la adolescente- él no fue a ese boliche”. Y aseguró que llevó ante la justicia “pruebas y testigos” que probaban dónde y con quien estuvo T. esa noche.
Lo que dijo la Cámara de la investigación
El eje central del expediente fue el testimonio de una adolescente, amiga de Melina, conocida como M. Según ella, Chavito, Narigón, T. y el pai umbanda violaron y mataron a la joven para ocultar la violación. M. declaró varias veces en la fiscalía. Cuando se refirió a la testigo, Novarese habló de “falso testimonio” y que en la resolución de la Cámara lo consideran “cambiante y fragmentado”.
En el escrito donde resolvieron revocar las tres preventivas de los mayores-al que tuvo acceso Infojus Noticias- los camaristas Solange Cambet, Carlos Julio Hermelo y José Marinaro, cuestionaron lo actuado hasta el momento por la fiscal María Fernanda Billone, a cargo de la causa desde el principio. Dicen que la pesquisa es un “terreno fértil de dubitaciones” y califican de “cansino” el paso de los investigadores. Billone por su parte, aseguró que sigue confiando en el testimonio de M., la "testigo clave" de la causa. El expediente está caratulado como "homicidio criminis causa agravado por el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por femicidio en concurso real, y abuso sexual agravado".
Otro de los pilares sobre los que se estructuró el expediente fue la cuestionada “confesión” de Chavito, el primer detenido del caso. “Esta causa se armó por una autoincriminación que no fue tal”, dijo su abogado Doutres.
A Chavito lo detuvieron 18 días después de que Melina había desaparecido. Su testimonio fue la punta del ovillo para que la fiscal Billone, convirtiera un expediente que se inició como averiguación de paradero en una investigación por femicidio. De acuerdo a la versión policial, Chavito se quebró y entre llantos confesó el crimen.
Según su abogado, la “confesión” fue conseguida por la policía bajo amenazas y torturas. Un informe médico lo corroboró: dice que el joven de 20 años fue golpeado tras su detención. Chavito también se lo contó a la fiscal. Por el asesinato hubo otras dos personas detenidas. Fernando, conocido en la causa como “el chico del beso”, fue el primero que quedó libre. Aparecía besando a Melina en la puerta del boliche donde se la vio por última vez con vida. Javier “El Pelado” Rodríguez, de 44 años, estuvo 27 días tras las rejas. Rodríguez había sido detenido en su casa del barrio Escalada, en Pablo Podestá. El hombre salió de su casa en Pablo Podestá porque escuchó ladridos y Chavito lo marcó mientras los policías lo capturaban encapuchado. En sede judicial dijo que él no tenía relación con el caso y lo había señalado obligado.