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El Tribunal Oral Federal de Santa Fe fijó para la semana próxima la jornada de alegatos en el juicio oral a seis personas acusadas de "trata de personas con fines de explotación sexual" y "abuso sexual reiterado" de una joven que al momento de ser secuestrada tenía 15 años. El fiscal de juicio Martín Suárez Faisal abrirá la audiencia el próximo martes y el miércoles continuará con los alegatos de las defensas. Ayer terminaron de declarar los 72 testigos y el jueves de la semana que viene podría haber una sentencia.

J.N.C. era una adolescente en septiembre de 2010, cuando la secuestraron a la salida de un boliche, en la ciudad de Santa Fe, para prostituirla. Esa noche una chica se hizo pasar por amiga de J.N.C., que estaba inconsciente, y subieron juntas a un remís. A J.N.C. la bajaron del vehículo a los golpes en las afueras de la capital santafesina y la obligaron a entrar a un rancho de chapa, donde la forzaron a prostituirse. La familia hizo la denuncia y dos semanas después agentes de la policía dieron con la víctima en San José de San Rincón. Fue gracias a mensajes de texto anónimos que habían llegado a los familiares.

El juicio oral comenzó a mediados de agosto. El tribunal integrado por los magistrados José María Escobar Cello, Miguel Abásolo y María Ivon Vella (presidenta) ayer terminó de escuchar a una larga lista de testigos, a la directora de la División de Trata de Personas de la Policía de Santa Fe y al padre de una de las imputadas. A lo largo de las audiencias se tomó declaración a vecinos, familiares, peritos, amigos de la víctima y policías.

Tres de los seis imputados eran menores en el momento de los hechos. Se trata del remisero Cristian Fabián Distéfano (19);  Víctor Gabriel Villalba Jara (20), quien controlaba el lugar de encierro; y Ludmila Giuliana Rulera (19), quien habría captado a la víctima. “No es para nada común que haya imputados menores en un caso como este”, señalaron a Infojus Noticias fuentes de la Fiscalía. “Lo que cambia es que el juicio se hace a puertas cerradas y que, si son culpables, no tendrán pena de prisión”, explicaron.

Los otros tres imputados son el expolicía José Luis Maza (51 años), en funciones al momento de los hechos; Miriam Graciela Villalba (44), la mujer que habría mantenido a la joven en cautiverio; y el novio de Ludmila Rulera, Darío Ricardo Cañete (24 años). Todos están procesados por el delito de "trata de personas con fines de explotación", agravado porque la víctima tenía 15 años al momento de los hechos, por la participación de tres o más personas, y por la condición de policía de una de ellas. Maza y Cañete también se encuentran procesados por abuso sexual reiterado.

Las defensas están a cargo de Fernando Sánchez, Germán Artola y Mariana Rivero y Hornos, defensores públicos oficiales; la asesora de Menores, Graciela Yocca; y los abogados particulares José Ignacio Mohamad, Horacio Paulazzo y Miguel Rodríguez Ortiz de Rozas.

A lo largo del juicio, se supo que los mensajes de texto anónimos los había enviado otra joven, conocida de la víctima, que estuvo en el boliche la noche que secuestraron a J.N.C. La informante pudo ver a la captora, a quien conocía de vista y sabía de su casa en San José del Rincón, por eso comenzó a sospechar de la desaparición de J.N.C.

En diálogo con la agencia Télam, Claudia Albornoz, integrante del Foro Santa Fe contra la Trata, dijo que se trata de "un delito aberrante que cada día se visibiliza más en los barrios de esta ciudad". "Hay muchas mujeres y niñas secuestradas y muy pocos procesos judiciales en marcha", enfatizó.