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Estefanía Heit y su esposo, el falso pastor Jesús Olivera, se negaron declarar en la última jornada de testimoniales del juicio en el que están acusados de mantener cautiva durante tres meses a Sonia Molina, en su casa de Coronel Suárez, en 2012. Las partes preparan los alegatos que comenzarán mañana a partir de las 10.

La audiencia comenzó con la negativa a declarar de los dos acusados. El Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 de Bahía Blanca, dispuso entonces continuar con los últimos testigos, todos ellos pedidos por la defensa.   

El principal testimonio de la jornada fue el de Gustavo Villanueva, operador de LU36 Radio Coronel Suárez, compañero de trabajo de Heit en el programa de la ONG Visión 21. En su declaración, dijo:  “ONG Visión 21 tenía un programa los sábados a la mañana y se vinculaba con centros de estudiantes y actividades con el resto de la sociedad para difusión y beneficio de algunas instituciones”.

El testigo recordó que a uno de los programas, en octubre de 2012, fue como invitada Sonia Molina para contar su historia de vida. "Se le iban haciendo preguntas y ella (Molina) respondía. Estaba muy triste, una voz calma, apagada, muy delgada y con ropas grandes", declaró Villanueva.   

Una vez terminada la audiencia, los jueces pasaron a un cuarto intermedio hasta mañana a las 10 para comenzar la ronda de alegatos.

Heit y Olivera están acusados de reducir a la servidumbre, lesionar gravemente y estafar a Molina, y en el caso del falso pastor, también, de abusar sexualmente de ella.   

El caso comenzó a investigarse en noviembre de 2012 cuando Molina logró escapar de la casa de la pareja y denunció las vejaciones a las que era sometida. En la primera audiencia, Molina relató ante el Tribunal su historia: “Olivera me violaba para sacarme al demonio”, dijo.