El Ministerio Público Fiscal solicitó que se llame a indagatoria a Sebastián Torres acusado de ser el autor del homicidio de Roberto Autero, de 16 años, perpetrado el 7 de febrero pasado. Según la acusación el uniformado baleó al adolescente cuando estaba de espaldas y llevaba un arma de juguete.
El Ministerio Público Fiscal, a través de la Procuraduría de Violencia Institucional, pidió que se cite a declaración indagatoria al agente de la Policía Metropolitana Sebastián Torres acusado de ser el autor del homicidio de un adolescente de 16 años perpetrado el 7 de febrero pasado. La víctima llevaba encima un arma de juguete y corría de espaldas al agente de la policía porteña cuando recibió un disparo en la cabeza.
Las actuaciones las llevan el fiscal nacional Fernando Fiszer y el fiscal general a cargo de la PROCUVIN, Miguel Palazzani. Ellos pidieron que se cite a indagatoria a Torres por el homicidio calificado de Roberto Autero. Según publicó el portal Fiscales, el agravante en la imputación está dado por ser miembro integrante de las fuerzas de seguridad con abuso de su función y por la utilización de arma de fuego.
El crimen se desató el 7 de febrero de 2015 cuando Autero golpeó con un arma de juguete la ventanilla del auto en el que se encontraba Torres –funcionario de la Dirección de Vigilancia y Prevención de la Policía Metropolitana–. Testigos del hecho declararon que, el adolescente se asustó al ver bajar al agente de la policía y salió corriendo. Entonces, según la acusación, Torres disparó con su arma reglamentaria. Autero se encontraba de espaldas y a escasa distancia. El impacto le dio en la cabeza. Su muerte fue inmediata.
Los representantes del Ministerio Público resaltaron que “resulta contrario al sentido común suponer que la víctima, con pleno conocimiento de que la réplica que tenía era un juguete, pudiera llegar a apuntarle a una persona con uniforme de una fuerza de seguridad que, como también es conocido, habitualmente se encuentran armados, incluso cuando se encuentran fuera de servicio”.
Finalmente, Fiszer y Palazzani manifestaron: “En base a estos elementos, entendemos que se encuentra acreditado el grado de sospecha requerido por el ritual a los fines de que el imputado sea convocado a prestar declaración indagatoria, ya que la prueba reunida indica que Torres disparó contra el adolescente Roberto Autero cuando éste corría de espaldas, se encontraba absolutamente indefenso y no mediaba ningún tipo de agresión que pudiera eventualmente justificar la conducta que se imputa”.
FISCALES/JC