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Una foto. A la izquierda el juez rosarino Juan Carlos Vienna, a cargo de la megacausa en la que están procesados algunos miembros de la banda Los Monos y policías cómplices. En el medio dos mujeres. A la derecha Luis Paz, padre del “Fantasma” Martín Paz, asesinado por la organización que el magistrado investiga. Los cuatro miran una pelea de box del “Chino” Maidana en San Antonio, Estados Unidos. A partir de esta prueba, los abogados del policía Sergio Raúl Blanche pidieron nuevamente la recusación del magistrado. En simultáneo realizarán una presentación ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos por “más de cincuenta irregularidades” en la investigación.

Cuando se conoció la foto, el juez intentó defenderse: "Es trucha, parece estar trucada". Después, en un programa de televisión admitió que la imagen “es real”, pero dijo no haber visto al padre del “Fantasma” esa noche. “El magistrado mintió al decir que no estuvo con el señor Paz, cuando las pruebas demuestran lo contrario”, dijo a Infojus Noticias el abogado José Nanni y agregó: “Hay registros de Migraciones que demuestran que viajaron juntos”.

El abogado se presentó hoy en los Tribunales provinciales de Rosario para realizar la presentación. Primero, Vienna debe decidir si acepta el planteo. Si lo rechaza, será la Cámara de Apelaciones la que defina si el magistrado continúa al frente de la investigación.

“Hay un cúmulo de pruebas o indicios que hacen dudar de la imparcialidad del doctor Vienna. Acá hay una violación a la garantía de parcialidad. No es serio que el juez viaje con la persona que sería la supuesta víctima de este hecho. Además habría que investigar quién pagó el viaje, el hotel”, dijo Nanni.

Este es el segundo pedido de recusación presentado de la defensa del policía Blanche. Los abogados ya lo intentaron hace algunos meses, cuando se conocieron los informes de Migraciones que demostraban que Vienna viajó dos veces a Estados Unidos en la misma fecha que Luis Paz. La primera fue entre el 30 de abril y el 14 de mayo de 2013, para presenciar la pelea entre Floyd Mayweather y Marcos Guerrero en Las Vegas. Entre el 12 al 21 de diciembre de ese mismo año volvió a viajar para ver el enfrentamiento entre Marcos Maidana y Aaron Broner en San Antonio. En el primer viaje, el juez y el padre del “Fantasma” subieron al mismo avión con segundos de diferencia. “Los dos viajes los pagué yo, de mi bolsillo y lo puedo demostrar con los resúmenes de las tarjetas de crédito", se defendió Vienna.

"Si me hubiese cruzado con el señor Paz no hubiese tenido problema en saludarlo porque lo conozco. Y no sólo lo conozco porque después de los allanamientos al barrio Las Flores el 31 de mayo del año pasado para desbaratar la banda de Los Monos él se acercó al juzgado para aportar información valiosa para la causa, sino porque lo vi el día que mataron a su hijo en la escena del crimen. Y porque yo fui el único juez que lo procesó y lo mandó preso en una causa por amenazas coactivas contra su mujer, que es su único antecedente penal", dijo el juez.

En Washington

Mientras el abogado terminaba de preparar el pedido de recusación, su socio Paul Krupnik viajó a Washington para realizar una presentación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) “en la que se enuncian más de 50 irregularidades”, según explicó Nanni. “Las más importantes son: mal desempeño en el accionar del juez -traducido en reuniones secretas con miembros del poder político, del poder policial e imputados-, intervención telefónica a abogados defensores, violaciones a las garantías constitucionales y operación mediática y política”, detalló.

El “Fantasma”

La Justicia llegó hasta la cúpula de Los Monos a partir de la investigación iniciada en septiembre de 2012 por el homicidio del “Fantasma”Paz -cuñado del Pájaro Claudio Cantero, líder de Los Monos asesinado el domingo 26 de mayo de 2013-.

La causa judicial, en manos de Vienna, tiene tres cuerpos y más de mil fojas. Las escuchas telefónicas, los testimonios y las investigaciones policiales le permitieron descubrir cómo funcionaba la banda de Los Monos. El magistrado ordenó la detención y procesó a más de 25 personas, entre miembros de la banda y policías por asociación ilícita y tenencia de armas de fuego. La Cámara confirmó la mayoría de los procesamientos, pero con el paso de los meses, muchos de los acusados quedaron en libertad o con prisión domiciliaria. “En la cárcel hay solamente tres o cuatro acusados que tienen otras causas”, contó Nanni.