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Anabella Carone estaba en su casa la madrugada del 10 de noviembre del 2005. Alrededor de las 3.30 de la mañana la policía le tocó el timbre. Le dieron una noticia que cambiaría su vida: su hijo Daniel se había ahorcado en las instalaciones de la comisaría 9ª. “Después de eso fui con mi esposo a la comisaría y ahí hablé con la que en ese momento era la fiscal. No recuerdo su nombre y apellido. Le dije que quería ver a mi hijo y me llevaron a la morgue del San Martín. Ahí lo vi. Estaba muerto", afirmó la madre de Migone.

Carone agregó: “Cuando los policías me dijeron en la puerta de mi casa que Daniel se había matado con su campera les dije: ‘Me lo mataron ahí adentro’. Yo sabía que era imposible que Daniel se suicidara. Espero que los culpables reciban la máxima condena que se merecen. Es lo menos que podemos esperar después de 8 años de angustia”, dijo la mujer.

Daniel Migone vivía en la casa de sus padres con sus dos hijos. Trabajaba hacía cuatro años en la empresa “Ave Plata”. Con el tiempo había pasado de repartidor a encargado de cobranzas. Lo detuvieron la noche del 9 de noviembre de 2005. Fue encontrado muerto en la celda de contraventores de la comisaría 9ª poco tiempo después. Según los relatos de los policías, Migone se ahorcó con una campera de jean. La autopsia determinó que no fue así, que murió ahorcado por un accionar compatible con la presencia de un tercero. Tenía traumatismo de cráneo y lesiones en los testículos. No tenía huellas en el exterior de su cuerpo que evidenciaran la hipótesis policial del propio ahorcamiento.  

El testimonio de los peritos que realizaron la autopsia, las declaraciones de los detenidos y ex detenidos que estaban aquella noche en la dependencia policial, reafirman la hipótesis de la fiscalía y el abogado defensor de la familia Migone: Daniel fue torturado y asesinado por efectivos policiales.

Según los testimonios de varios ex detenidos, Daniel esa noche se quejaba y golpeaba la puerta de la celda pidiendo que lo saquen porque le estaban armando una causa. También detallaron que los golpes en la comisaría eran habituales para presionar a los detenidos para que se hicieran cargo de robos y otros hechos.

El juicio llevado a cabo por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 4 de La Plata está en la recta final. Mañana a las 11 se realizará una inspección ocular en las instalaciones de la comisaría 9ª por pedido de Julio Beley, abogado defensor de Carlos Ariel Tolosa, uno de los cinco ex policías imputados en la causa.

En esa misma comisaría fue también torturado, asesinado y desaparecido Miguel Bru, veinte años atrás.
 
Tolosa y Daniel Guillermo Espósito están imputados por tortura seguida de muerte. El capitán Marcelo Fabián Falcón y la oficial María Valeria Maciel, están imputados por omisión de evitar torturas seguidas de muerte. El teniente Luis Díaz Zapata es juzgado por ambos delitos.

Está previsto que Tolosa declare en la próxima jornada del juicio. En función de su testimonio los demás abogados defensores evaluarán si los cuatro inculpados restantes prestarán declaración. Se espera que esta semana terminen las audiencias y comience la instancia de alegatos.

Qué pasó aquella noche en la comisaría y quiénes fueron los responsables de la muerte de Daniel Migone. Dos preguntas que están cada vez más cerca de encontrar una respuesta.