Por la mañana hubo una clase de la coordinadora de la Comisión de Acceso a la Justicia de la Corte Suprema, Gladys Stella Álvarez. También hubo paneles sobre mediación familiar y otro sobre abordaje de conflictos sociales. El encuentro está organizado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y el Ministerio de Justicia de Salta.
En este segundo día del Primer Encuentro Federal de Mediadores cambió un poco el contexto. Ayer, durante la primera jornada, el tiempo caluroso acompañó pero hoy, aunque el calor siguió, las lluvias se hicieron presentes. Y fue bueno, porque desde hacía ya un tiempo que se esperaba que llueva en la provincia. Como cualquier encuentro con gran cantidad de asistentes, los paneles y talleres eran simultáneos y de temáticas diferentes. Por la mañana hubo una clase magistral de la coordinadora de la Comisión de Acceso a la Justicia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Gladys Stella Álvarez, que ayer había dado un diagnóstico de la situación en el país. También hubo paneles simultáneos, uno sobre mediación familiar y otro sobre abordaje y facilitación en conflictos sociales.
El encuentro está organizado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y el Ministerio de Justicia de Salta. El lema es “Promoviendo la construcción de redes”. Comenzó ayer y termina mañana.
Cintia es una joven salteña cuya apariencia ni siquiera da cuenta de que podría estar estudiando en la universidad. Muy arreglada, podría decirse que parece mayor que la edad que tiene. Mientras se encontraba “haciendo tiempo” en el lobby del Hotel Alejandro I, contó que una profesora, que es abogada, les dijo que fueron al encuentro a “conocer”. “Me sirvió conocer experiencias de Perú, Ecuador y otros países”, dijo al salir de uno de los paneles, el de Abordaje y Facilitación en Conflictos Sociales.
Por la tarde/noche las jornadas pasaron de paneles a diversos talleres sobre diversos tipos de mediación: escolar, familiar, penal y penitenciaria. En una de ellas, una frase dio el pie: “Ustedes son gorras”. Fueron las primeras palabras que escucharon cuando comenzaron a implementar la mediación penitenciaria en algunas unidades penales federales Patricia Castelanelli, coordinadora de capacitación de la Dirección Nacional de Mediación y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos, y Miriam Markus, integrante del equipo de docentes de la Dirección Nacional de Mediación y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos del Miniterio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
“Incorporar un sistema diferente o tratar de incorporar otra forma de resolver conflictos” es complejo cuando se intenta trabajar dentro de un penal, dijo Markus. En cuanto a los “detalles”, Castelanelli habló también del contexto para mediar con internos. “La luz importa”, sintetizó ejemplificando la necesidad de que el sol se vea y de que, muchas veces en la cárcel, el “contacto con el verde” sí es importante.
Dora es rosarina, trabajadora social, y trabajó varios años en penales de aquella ciudad integrando equipos interdisiplinarios. En medio del taller de mediación penitenciaria habló de su propia experiencia en un proceso de mediación entre internos. Se generó una pelea en una comisaría. “Cómo me conocían, me llamaron para que mediara”, contó y agregó que “nadie se animó a sacarle las esposas” a los internos. La finalmente la mediación culminó. “Yo si te cruzo en la calle en libertad, lo arreglábamos de otra manera, ahora está todo bien”, le dijo uno de los detenidos, protagonista de esta anécdota, al otro. La mediación había hecho efecto.
El encuentro continuará mañana con un panel sobre buenas prácticas de mediación comunitaria en el que estará la ministra de justicia de Salta, María Inés Diez; Marcela Uthurralt, directora nacional de Mediación y Métodos Participativos de Resolución de Conflictos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación; y Gabriela Rodríguez Querejazu, especialista en Gestión y Resolución de Conflictos Comunitarios. Después será el acto de cierre.